sábado, 23 de noviembre de 2024

70% busca comida que se adapte a su estilo de vida

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Los consumidores en forma creciente aspiran a adquirir productos alimenticios que se adapten a sus singulares necesidades nutricionales, de estilo de vida, metabolismo y hasta en función de sus demandas éticas relacionadas con la sustentabilidad.

“Eres lo que comes”. Siete de cada diez argentinos manifestaron estar de acuerdo con esa frase según el capítulo local de “Taste Tomorrow”, el estudio sobre tendencias en consumo de panadería, pastelería y chocolatería más grande del mundo que realizó en 2021 el grupo Puratos en 44 países de todos los continentes.

La misma investigación, que en la región también se realizó en Brasil, Chile, Costa Rica, México y Perú, también mostró que un 63% de los consumidores argentinos adaptaría su consumo de alimentos si supiera cuál es su dieta óptima en función de su ADN, contra un 51% que pensaba lo mismo en 2018, mientras que en el país ya hay un 70% de consumidores que afirman estar buscando “comida adaptada a su estilo de vida individual”.

Los porcentajes de respuesta le dan forma a una tendencia global entre los consumidores que cada vez más aspiran a adquirir lo que se denomina “alimentos hiperpersonalizados”, es decir que se adapten a sus singularísimas necesidades nutricionales, de estilo de vida, metabolismo, perfiles biométricos y hasta en función de sus demandas éticas relacionadas con la sostenibilidad y sustentabilidad integral de los procesos por los que llegan a la mesa de los hogares.

Cuestión de gustos

Los gustos en materia de comida siempre fueron personales. Aquello de “sobre gustos no hay nada escrito” enseguida produjo su refutación entre quienes afirmaron que, en realidad, “en gustos está todo escrito”.

La industria alimenticia del siglo XX debió lidiar con esta conversación en el marco de una tendencia a uniformizar las preferencias para lograr escalas, al mismo tiempo que ponía en escena una enorme variedad de alimentos a disposición.

Entrado el siglo XXI, el futuro depara que, en materia de gustos, “todo estará digitalizado” a tal punto que, en base a esa información, nadie en una misma casa va a comer lo mismo. Y para llegar a eso, el secreto está en la inteligencia artificial y en los robots que van a preparar las comidas en función del gusto de cada uno.

En este contexto, la búsqueda de alimentos saludables que tengan propiedades funcionales surge como consecuencia de una tendencia global de salud y bienestar que, potenciada por la sensibilidad que dejó la pandemia de coronavirus, ha llevado a la industria de alimentación y bebidas a diseñar una amplia gama de productos que se adaptan a las expectativas y necesidades de distintos sectores poblacionales, y que está en un proceso constante de innovación.

Un ejemplo de esto es Kitchenita, con el desarrollo de conceptos gastronómicos basados en inteligencia artificial, analizando y descubriendo la necesidad de los consumidores y ofreciendo propuestas acordes a esa demanda.

Superalimentos

Los también llamados “alimentos funcionales” salen al cruce de esta nueva realidad social que, desde diferentes necesidades nutricionales, solicita alimentos que mejoren el bienestar, prevengan dolencias y enfermedades y proporcionen un aporte extra con el que conseguir una vida más activa y saludable.

“La salud se ha convertido en un tema prioritario para los argentinos y para los latinoamericanos en general y cada vez son más conscientes de lo que comen y cómo esto los beneficia o perjudica”, explicó Sabine Brusselmans, gerenta de Marketing de Puratos para Argentina, Paraguay y Uruguay.

Brusselmans sostiene que la Taste Tomorow mostró también cómo “los consumidores de la región cambian poco a poco sus hábitos alimenticios y confían en que, con la ciencia y tecnología, se diversifican las opciones de pan, pastelería y chocolates para tener algo que se adapte a su anatomía, salud y gustos”.

En el relevamiento el 71% de los latinoamericanos advirtió que agradecerían productos en el mercado que se adapten a lo que necesitan.

En la Argentina, en particular, el 63% contestó que agradecería pasteles y pastelería fina adaptada a sus necesidades nutricionales personales y un 67% agradecería, en particular, un pan adaptado a su nutrición personal.

Según los datos globales de la Taste Tomorrow, los consumidores cada vez se interesan más por mejorar su alimentación  con ingredientes y productos bajos en grasa y calorías al buscar opciones saludables como gluten-free (68%), ricas en prebióticos (70%), harina rica en fibra (63%) o sin levadura (58%), así como aquellos alimentos bajos en azúcar (74%) o con endulzantes alternativos (69%), con el objetivo de  mejorar sus hábitos alimenticios, su calidad de vida y controlar enfermedades crónicas o prevenirlas.

La fibra dietética es clave para los latinos, en particular: el 84% afirma que tiene un efecto positivo en su salud intestinal al mejorarla, ya que contiene probióticos que mejoran y favorecen la digestión.

Asimismo, la Masa Madre se ha posicionado como un ingrediente saludable: 7 de cada 10 consumidores latinos afirmaron que tiene beneficios por sus ingredientes naturales y prebióticos que, además, pueden dar un toque diferente a sus recetas. 

La mente también es importante

La salud mental también es parte importante para los consumidores y consideran que tener una alimentación saludable es clave para estar emocionalmente sano (78%) y la salud gastrointestinal es la base para ello (83%).

Algunos de los alimentos que se perciben como promotores de la salud mental es el chocolate con alto porcentaje de cacao ya que ayudan a reducir el cortisol (estrés) y ayuda a que tenga un efecto aliviador para estas sensaciones por sus ingredientes como el magnesio y el GABA.

De la sección argentina de Taste Tomorrow participaron 400 consumidores, quienes dejaron establecidos otros datos fundamentales sobre sus preferencias a la hora de consumir pastelería, panadería y chocolate.

Surgió, entre otros, la inclinación de los argentinos por productos conectados con la tendencia plant based, lo que se verifica en cómo aumentó la gente que los compra al menos una vez por semana en el país, que pasó de 5% en 2018 al 51% en 2021.

En los restantes países de la región que participaron del relevamiento ese porcentaje pasó en promedio del 14% en 2018, al 37% en 2021, es decir que la Argentina encabeza el ranking regional de consumo de productos plant based por frecuencia de actos de compra.

Latinoamérica es una de las regiones donde las búsquedas por alimentos de origen vegetal más crecieron en el último año por ser considerado más saludable (69%).

Además, en la Argentina en 2021 ya hay un 27% de personas que compra productos plant based una vez por día cuando esté porcentaje era menor al 6% en 2018.

“Tener una salud intestinal estable es clave no solo para el bienestar mental, también ayuda a aumentar la masa muscular y mejorar las defensas al fortalecer el sistema inmunológico y nuestros consumidores son conscientes de ello al buscar opciones que promuevan esto acorde a sus necesidades particulares, ya que la genómica es importante cuando se habla de nutrición y se trata de buscar alimentos que tengan beneficios para cada uno, así como saber moderarse”, reafirma Brusselmans.

Aunque la Taste Tomorrow estableció que el sabor sigue siendo el factor más importante cuando se compra pastelería, panificados y chocolate, la higiene y el carácter saludable de los productos se ha vuelto una prioridad para muchos consumidores.

“De hecho, la Taste Tomorrow’ de este año se denominó  ´Comida más allá de la Nutrición´, recordó Brusselmans  para subrayar un concepto que integra todos los cambios del último año causados por la pandemia y, también, los cambios que, en la percepción de los consumidores, se han generado con la recuperación de la normalidad en algunos países y la nueva manera de vivir y desenvolvernos en todos los ambientes”, concluyó.

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