viernes, 27 de diciembre de 2024

El gobierno y la oposición deben pensar la Argentina

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Ni el gobierno ni la oposición se han dado el margen para pensar en la Argentina que viene, en el largo plazo, para aprovechar la recomposición del sistema global que plantea la actual crisis, con epicentro en Europa. Lo plantea el ex ministro de Economía, Martín Lousteau, en una entrevista concedida a “Mercado” para hablar sobre el capitalismo que viene.

<p><strong>- ¿Los empresarios deberán cruzarse de brazos y esperar su turno hasta que se llegue a un equilibrio?</strong></p><p>-Ese mundo de libertades muy amplias que había tenido el sector privado, con estructuras que perciben el beneficio a corto plazo, se empezó a acabar y van a tener que pensar un poco más en términos no de rentabilidad social pero sí del rol que les cabe, porque hay una parte de la hiperliberalización de ciertas figuras jurídico financieras que, si bien fueron pensadas en una primera instancia para facilitar el cauce del capitalismo en grandes proyectos, se tornaron tan hiperbólicas que fueron en detrimento de su concepción original, contribuyendo a menoscabar esa parte del capitalismo.<br /><br />Por ejemplo, la idea de cuál era el rol que cobraba la sociedad de responsabilidad limitada y de sociedades anónimas, era si no en los grandes proyectos de infraestructura, grandes empresas cómo hacer para que el telégrafo llegue de un lado a otro del Atlántico, o los ferrocarriles, en esos casos, era tan grande la empresa que no proveer ciertas contenciones desde el punto de vista de las posibles consecuencias, hubiera implicado que durante mucho tiempo generaciones y generaciones de emprendedores de esos proyectos, hubieran estado, si funcionaban mal los emprendimientos, debajo del agua.<br /><br />Cuando esto se utiliza de tal modo que las empresas dejan de tener prácticamente vinculación con el riesgo personal, y además, en el medio le meto gerentes en lugar de empresarios y también genero acciones y pago a los gerentes en virtud de las cotizaciones de las acciones, en lugar de pensar estrategias de desarrollo de largo plazo estamos … el objetivo de ese gerente es que mañana mejore el valor de las acciones, independientemente de si menoscaba el desarrollo futuro de la empresa , porque la acción vale más y porque el top option que me pagan a mí vale más y me hace más rico. <br />Todo esto es parte de lo que actualmente está en revisión.<br /><br />Salvo algunos teóricos o algunos marxistas con alguna buena lectura que dicen, bueno, todo lo que había dicho Marx nunca había sucedido, hasta ahora, o esa visión exagerada o provocativa, uno no ve el fin del capitalismo.<br />Lo que sí veo es el fin de la desregulación absoluta. No creo que haya terminado el libre mercado, pero sí que siga exento de reglas y de conducción política. Si, en cambio, hoy día está bien, esta es el agua y el agua va en un río que no está desbordado ni fuera de cauce, sino que su selección sería la tarea de la política.</p><p> </p>

<p><strong> ¿Latinoamérica quedó a salvo de la crisis global?</strong></p>
<p>-Latinoamérica no puede analizarse en bloque, porque los países del Caribe tienen una situación distinta del boom vivido en Sudamérica, su economía es más dependiente de lo que ocurra en el Norte y no cuenta con los recursos naturales nuestros. Justamente, no pudieron aprovechar esta nueva estructura del mundo, con poblaciones muy grandes que ahora demandan por ejemplo alimentos, que antes no requerían.<br />
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Tampoco Sudamérica es tan igual. Hay países que democratizaron el acceso al poder hace mucho tiempo, Argentina es uno de ellos, y otros que recién están viviéndolo, con desfasajes, discusiones y desprolijidades propios de esos procesos, como Bolivia o Venezuela. Hay oligarquías o aristocracias gobernantes, como en Colombia o Chile, donde ese modelo, después del éxito de mucho tiempo, está crujiendo, porque para los estudiantes ser universitarios en Chile antes implicaba el acceso a un club privado, al que muy pocos llegaban, pero esa oportunidad se expandió y ahora casi no significa nada.<br />
Y por supuesto está el caso de Brasil, lo que sí es común a los países sudamericanos es que lo que antes valía poco de lo que tenemos, ahora vale más; creo que es importante que lo aprovechemos en el mundo que viene, pero que lo cuidemos.</p>
<p><strong>- ¿Los recursos naturales nos dan ventajas en esa recomposición?</strong></p>
<p>-Hay cosas que exportamos y las incluimos sin darles el valor real, lo que es parte de lo que tenemos que empezar a pensar de cuidar. Una es el agua. Está incluida en todos los productos agrícolas, si no la pagan adecuadamente, no tiene sentido.<br />
Desde el punto de vista de la proteína que se consigue por agua, la soja es muy ineficiente, por eso algunos países no la explotan, como China, que la cultiva mucho menos que antes. Necesita mucha agua para conseguir la misma cantidad de proteína. O Israel, que decide hacer menos cítricos porque son muy agua intensivos. Por eso nosotros, como región, la capacidad que tenemos de generación de energía, su aprovechamiento, y otros recursos naturales, que son nuestra ventaja hoy, deberíamos cuidarlos de otra manera. En el caso de Argentina, hemos tenido durante mucho tiempo una población muy educada.</p>

<p>Y para que pueda tener una buena calidad de vida, pasan dos cosas, o se subsidia la empresa en la que trabaja o se le da crédito a la empresa para la que trabaja, y como a la larga no es eficiente esa empresa, igual la mantengo a flote o le doy crédito a él para suplir el ingreso que ahora no tiene.<br /><br />Si uno ve esa estructura productiva mutando y sobre eso el mundo financiero hiperdesregulado empieza a suplir esas pequeñas brechas, en el corto plazo pareciera que está funcionando bien, pero la tendencia de bajo es aumento en la desigualdad de ingreso e ingresos insostenibles en algunos sectores.<br /><br />Y eso es lo que vamos a vivir ahora. La primera manifestación es eso de que aceleramos mucho, pero la segunda es por qué: porque le dimos pie al capitalismo que exigía de los individuos patrones de consumo insostenibles con esa estructura de producción que empezó a mutar. Lo que lo hizo parecer sostenible en el corto plazo fue la desregulación financiera.</p><p><strong>- ¿Acompaña la calidad actual de los liderazgos políticos la imposición de cambio que marca el propio colapso del sistema financiero que no para de impactar en la economía real?</strong></p><p>-Burbujas en el pasado hubo, lo mismo que inconsistencias acumuladas, pero la calidad de liderazgo que tenemos ahora en el mundo es muy distinta de la de los ´60, ´70 e inclusive en los 80. Si uno compara los líderes actuales y este es el meollo para la resolución de fondo de las cuestiones o no, una vez que la crisis se acumula no hay resolución. <br /><br />Hay cómo contener el daño, que deja de ser técnica, porque dentro de una concepción puede encontrar una mejor alternativa, pero alguien tiene que concebir el color de las soluciones. Independientemente del contenido ideológico, si se compara a Cameron con Thatcher, a Sarkozy con Mitterrand, a Zapatero o Rajoy con Felipe González, o a Merkel con Köhl. Hoy la canciller alemana es como un Churchill para el mundo de hoy. El propio Obama no resiste comparado con Reagan. <br /><br />Y este déficit en la calidad en la generación de este tipo de liderazgos tiene que ver con los medios, que cuando empiezan a intermediar la conexión de la gente con el líder político, y sobre todo permiten un ascenso mucho más rápido, basado en su capacidad para generar apelación de los medios, en lugar desde el contenido y de la construcción política dentro de un partido, surgen estos liderazgos con menos sustancia.<br /><br />No tiene que ver con criticar a los medios o no, sino que es casi un tema evolutivo, ya que en determinado entorno va mutando y yendo hacia un lugar, pero desde el punto de vista de la sociedad o de la política en general, sí tienen un rol.<br />En muchos casos, el medio abandona su rol y pasa a ser un actor interesado. No se veía antes de la participación del capital privado en los medios.</p><p><strong>- Ante esta perspectiva, ¿qué margen existe para revalorizar del rol del Estado en la política y la economía?</strong></p><p>-Va a haber una revalorización del rol del Estado en la dirección de la economía y de la política. Es algo que en algún momento estuvo desprestigiado, pero cuando uno mira a los países asiáticos eso ha tenido mucha injerencia. Cuando se observa el desarrollo de los países occidentales, que hoy reniegan de esa injerencia, siempre la han tenido. <br />Una política desarrollista tiene ese componente. Pero hoy el poder corporativo es tan grande en algunos sectores que está bien que el Estado tenga poder para confrontarlos, de modo tal de mantener su objetivo en el bien común, que no es el capitalismo de amigos. Una cosa es condicionar a ciertos sectores o corporaciones en pos del bien común y otra es redireccionar el poder del Estado para que ese proceso capitalista me sea beneficioso a mí, ya sea desde el punto de vista personal o estatal a corto plazo. No tienen mucho que ver entre sí.</p><p> </p>

<p>El surgimiento del Estado de bienestar es una: que es la seguridad de la cuna y la tumba, una fórmula nacida en el Reino Unido después de la Segunda Guerra Mundial. <br /><br />La siguiente fue: “voy a regular ciertas actividades” pero olvidándonos de cómo ya estaban reguladas. <br />Por ejemplo, en el sector de medios no había capital privado que valiera. Y lo que se podía decir no se podía decir; en la Europa de posguerra todo estaba muy regulado. Nos olvidamos que las tasas de interés bancarias lo estaban, que los servicios públicos eran provistos por el Estado. Nos olvidamos que eso, que tenía un costo en términos de eficiencia micro, le daba a la gente la tranquilidad de que no podía repetirse el pasado. <br /><br />La desregulación de los ´80 crea en el mundo una tendencia global que permite que genere un boom que implica la salida de los problemas, una nueva seguridad, más salud, que en general tanto estadistas como economistas olvidamos que no son las grandes tendencias que no son perceptibles, entre ellas el cambio de la pirámide poblacional.</p><p><strong>- ¿Cómo afectó ese cambio en la pirámide poblacional al sistema económico?</strong></p><p>-En ese momento, a la salida de la posguerra, un montón de soldados que volvían a casa, después de haberse sufrido la merma en la población activa, una de las primeras cosas que hicieron fue procrear hijos. Y se produjo en consecuencia después de mucho tiempo un boom en el aumento de la población, que a medida que en los 50, 60 y 70 se fue convirtiendo en activa, creó una capacidad de ahorro fenomenal, ya que había menos pasivos y más trabajadores activos cuyo ahorro global permitió que existieran mejores condiciones en términos de la demanda de bienes de consumo y también del orbe, lo cual generó mucha sensación de bienestar que empezó a cambiar cuando esas tendencias se empezaron a revertir. Y sobre eso se sumó el conflicto del petróleo en los ´70 y una stangflation.<br /><br />Empiezan a crujir un poco las dos décadas doradas y se toman medidas que tienen que ver con volver a algunas fuentes de cómo debería funcionar el capitalismo que ya habíamos vivido en los ´20, por ahí, que era mucho más desregulado.</p><p><strong>- ¿Subsidiariedad del Estado o necesidad de subsidiar?</strong></p><p>-A medida que pasó el tiempo se generaron dos tendencias: primero que el Estado se relegara a sí mismo de ciertas responsabilidades, como los servicios públicos, parte del bienestar, etc, que se desregulara el capitalismo financiero cobrando una velocidad y libertades que antes no había tenido. Y también en términos productivos, porque a medida que el capital físico se empieza a poder relocalizar, y producir para un país dentro de otro país, con la bandera del de origen, pero en otro lugar, lo que empieza a ocurrir es que se larga una especie de competencia por salarios de los menos calificados, según la cual aquel que tiene capacidad para pensar una I-Pad va a tener un buen salario en Estados Unidos, pero el que tendría que haberlo hecho en EE.UU. tiene que competir con un chino para poder sobrevivir.<br /> </p>

<p>Entre los rescates a los bancos, a las empresas, como General Motors, y a las personas se usaron los recursos: porque si a un gobierno se le caen los ingresos por la recesión, o sea, recauda menos, pero igual decide gastar más en obras públicas o pagar seguro de desempleo, o por pobreza, lo que está haciendo es rescatar gente.<br /><br />Esto trae como consecuencia más déficit y acumulación de deuda, y en un momento de ese proceso, los acreedores preguntan: ¿cuánto debe este país, lo puede pagar? <br /><br />Y así surgieron las dudas sobre un montón: Grecia, Irlanda, Portugal, España, Italia, Francia, con lo cual llegamos al lugar actual, que es la crisis soberana.<br />Hay una cuarta etapa de la crisis, que aún no se ve, y tiene que ver con lo intergeneracional.</p><p><strong>-¿Es en la que aparece en el mundo un nuevo jugador: los indignados?</strong></p><p>- Hay una generación entera a la que le prometieron que iba a vivir con una determinada calidad y eso no se va a cumplir. Los indignados son la primera manifestación, lo escribí en el libro Economía 3D en 2010, cuando todavía no había ese tipo de expresiones.<br /><br />Esa generación ya tenía una serie de problemas de empleo, era difícil insertarse, lo que no se manifiesta sólo con el desempleo actual, sino que es: vamos a ajustar, tu jubilación no va a ser la que dijimos, tu salud ni la educación va a ser como te dijimos, o sea, todas las oportunidades ya no serán como se prometieron.<br /><br />Esto sí conlleva una revisión de cómo ha funcionado el mundo hasta ahora o del cariz actual de los últimos 20 a 30 años de capitalismo, que tiene que ver más con la desregulación extrema.<br /><br />Todavía no hemos visto las etapas finales de la crisis. Falta que terminemos de decantar o que terminen de bajar las aguas y se vea la podredumbre que está debajo y que se fue acumulando en ese fango del río. <br /><br />En lo menos filosófico, lo que habría es un sistema que lo que hizo fue generar con artificios financieros la capacidad de exceder deuda pública y privada para mantener estándares de vida que no eran sostenibles. <br /><br />Y no llegó, porque una vez que los países acumulan una cantidad de deuda como la que alcanzaron ahora sencillamente no se puede pagar, trajo aparejado lo que se ve: ajustes en la calidad de vida pero también una participación de los acreedores en ese proceso, porque es tan responsable aquel que tomó deuda en exceso como el que le prestó. <br />Esto es lo que empieza a vislumbrarse en los primeros barros que vemos en la bajada de la marea. Más en el fondo lo que hay tiene que ver con cómo ha sido de desregulación y qué ha implicado en términos de la forma que cobra el capitalismo.</p><p><strong>- ¿Cómo se da el tránsito de desregulaciones a regulación, retoma la “seguridad de la cuna a la tumba” de la posguerra?</strong></p><p>-Vivimos desde fines de la posguerra hasta principios de los 80 un mundo que protagonizó el nacimiento de algunas particularidades vinculadas con la inseguridad que había provocado una guerra detrás de la otra y la Gran Depresión. <br /><br />Y eso era que el Estado estaba ahí para regular y hacerse cargo de ciertas cosas y brindarle al ciudadano una sensación de que las catástrofes del pasado no retornarían.<br /> </p>

<p>&ldquo;Es la oportunidad de aprovechar lo que pasa internacionalmente, el impulso que tuvo la econom&iacute;a argentina y de salir de la posici&oacute;n conservadora que frente a ella asumi&oacute; el gobierno de Cristina Fern&aacute;ndez de Kirchner&rdquo;, afirma Lousteau.<br />
(Versi&oacute;n completa de la entrevista que se public&oacute; en la edici&oacute;n de marzo de Mercado, sobre &ldquo;El heredero del capitalismo&rdquo;)<br />
Le cuestiona a la actual administraci&oacute;n no haber acometido los desequilibrios de arrastre anteriores, como el fiscal, el cambiario y la inflaci&oacute;n. Y que en el pa&iacute;s s&oacute;lo se discuta de pol&iacute;tica, de los empresarios, de los medios y se mencione la crisis global, pero que en ning&uacute;n momento se haya buscado una confluencia de todos estos factores para, en alg&uacute;n espacio, tomar el tiempo y los recursos y pensar la Argentina. <br />
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&ldquo;Hace mucho que no se hace. Y sobre todo no se piensa a s&iacute; misma con la suficiente apertura de cara a lo que est&aacute; pasando en el mundo&rdquo;, dijo mientras se aprestaba a responder preguntas sobre la crisis y c&oacute;mo se ve desde la Argentina.<br />
&ldquo;Uno puede sobrevivir en el d&iacute;a a d&iacute;a, pero a menos que nos detengamos a hacer ese ejercicio, que cuesta desde todo punto de vista, porque requiere distraer actividad y recursos de lo cotidiano, para sentarnos a imaginar esta sociedad como futuro, sobreviviremos, pero no estaremos trabajando para que la generaci&oacute;n que nos suceda est&eacute; sustancialmente mejor que nosotros&rdquo;, reflexion&oacute;.</p>
<p><strong>- &iquest;Qu&eacute; hacer en un mundo que va cada vez m&aacute;s hacia una regulaci&oacute;n mayor y una protecci&oacute;n de sus propias comunidades?</strong></p>
<p>-Ser rigurosos, en el sentido intelectual y de gesti&oacute;n. No puede quedar en declamaci&oacute;n, sin estrategia de largo plazo y como reacci&oacute;n al problema de corto plazo, que no lleva a ning&uacute;n lugar.<br />
Argentina lamentablemente es un ejemplo de esto &uacute;ltimo. No s&oacute;lo en el gobierno, sino hace rato que no veo que los partidos pol&iacute;ticos en ning&uacute;n espacio piensen en el largo plazo. Y somos como una econom&iacute;a que creci&oacute; sin ning&uacute;n prop&oacute;sito, una identidad. <br />
<br />
Porque algunas cosas que hac&iacute;amos en un principio de este proceso, en el 2003, 2004, no fueron defendidas y son radicalmente opuestas a las que hacemos ahora: si era importante tener un tipo de cambio competitivo, y cuando era hipercompetitivo, el gobierno compraba reservas a pesar de que fueran caras para mantener el d&oacute;lar alto, cuando la tendencia era a bajar, hoy est&aacute;bamos vendiendo reservas baratas, con un tipo de cambio que ya no es competitivo. Esto confirma la falta de concepci&oacute;n u orientaci&oacute;n y que se vive de las zozobras cotidianas.<br />
<br />
-<strong> &iquest;En qu&eacute; punto de la crisis global nos encontramos despu&eacute;s de cuatro a&ntilde;os y medio de iniciada?</strong></p>
<p>-Hay que distinguir las etapas: la primera fue financiera, hubo p&aacute;nico; en la medida que los bancos se dieron cuenta bien qu&eacute; ten&iacute;an dentro de su activo, no s&oacute;lo se paralizaron ellos sino que pas&oacute; lo mismo con cualquier contraparte. <br />
Nadie sab&iacute;a si el otro iba a pagar o no, y entonces los gobiernos, particularmente el de EE.UU., con la Reserva Federal, proveyeron de liquidez necesaria para que no hubiera riesgos mayores. <br />
<br />
En la siguiente instancia vino que, como consecuencia del parate financiero, lleg&oacute; el de la econom&iacute;a real: una empresa que ten&iacute;a una l&iacute;nea de cr&eacute;dito y necesitaba m&aacute;s capital de trabajo o afrontar un vencimiento no ten&iacute;a manera de conseguirlo. O cuando necesitaba una contraparte financiera para una operaci&oacute;n se tornaba incierto, lo cual gener&oacute; una ca&iacute;da en la econom&iacute;a real: aumento del desempleo y ca&iacute;das del PBI en los distintos pa&iacute;ses, una recesi&oacute;n global.<br />
&nbsp;</p>

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