domingo, 22 de diciembre de 2024

El desafío del management 2.0

spot_img

En los últimos 10 años, Internet revolucionó los modelos de negocios y aumentó la eficiencia de los tradicionales. Lo que todavía no consiguió es modificar sustancialmente los modelos de gestión. En los próximos años el trabajo de gestionar podría verse transformado por las nuevas “tecnologías sociales”.

<p>Por Marcelo Manucci (*)</p>
<p><img src="../../../../mercado/ro/imagenes/foto_nota_1121_39_1.jpg" alt="" /><br />
Gary Hamel</p>
<p>Est&aacute; claro que hasta ahora la <em>Web</em> no ha logrado mucho cambio en la forma que las organizaciones se manejan y conducen. Las organizaciones tienen ante s&iacute; desaf&iacute;os que las presionan: cambio cada vez m&aacute;s r&aacute;pido, creciente n&uacute;mero de rivales no convencionales, desaparici&oacute;n de barreras de entrada, transici&oacute;n de una &ldquo;econom&iacute;a del conocimiento&rdquo; a una &ldquo;econom&iacute;a creativa&rdquo;, intensificaci&oacute;n de la competencia por el talento y profusi&oacute;n de nuevas demandas de todos los grupos de personas afectadas. <br />
Para hacer frente a todo eso, sostiene Gary Hamel, las organizaciones tendr&aacute;n que ser m&aacute;s adaptables, innovadoras, atrayentes y responsables que en la actualidad. Esto requerir&aacute; un reequipamiento total de las pr&aacute;cticas gerenciales tradicionales sobre la base de principios derivados de la <em>Web</em>. <br />
A diferencia de la mayor&iacute;a de los negocios, Internet ya es todo eso, adaptable, innovadora y atrayente. Tambi&eacute;n es una poderosa herramienta para lograr que las empresas se asuman como responsables de su impacto social. Mientras la empresa cl&aacute;sica est&aacute; basada en una arquitectura donde la toma de decisiones est&aacute; fuertemente concentrada en la cima, la <em>Web</em> est&aacute; construida sobre una arquitectura donde el poder est&aacute; altamente distribuido. <br />
El modelo gerencial que predomina en la mayor&iacute;a de las organizaciones tiene su origen en los primeros a&ntilde;os del siglo 20. Por aquel entonces, a los innovadores en <em>management</em> les preocupaba lograr eficiencia en gran escala. Encontraron la respuesta en la organizaci&oacute;n burocr&aacute;tica con &eacute;nfasis en estandarizaci&oacute;n, conformismo y control. <br />
Esos principios son los fundamentos filos&oacute;ficos del <em>Management</em> 1.0, y est&aacute;n arraigados en los procesos y la mentalidad del <em>management</em> actual. En casi todas las organizaciones actuales el poder se derrama en cascada de arriba hacia abajo, las estrategias se deciden en la cima, las tareas se asignan y no se eligen, los supervisores vigilan a los subordinados, el control se impone y los altos ejecutivos asignan los recursos.</p>
<p><strong>Desaf&iacute;os y l&iacute;mites</strong><br />
<br />
Antes de la <em>Web</em>, era dif&iacute;cil imaginar alternativas a la ortodoxia gerencial. Pero Internet produjo una explosi&oacute;n de nuevos formas de vida organizacional donde hay coordinaci&oacute;n sin centralizaci&oacute;n, donde el poder es producto de la contribuci&oacute;n, donde la sabidur&iacute;a de muchos es m&aacute;s importante que la autoridad de pocos, donde las comunidades surgen de intereses compartidos, donde la oportunidad de participar borra la frontera entre vocaci&oacute;n y hobby, donde t&iacute;tulos y credenciales cuentan menos que el valor agregado, donde el desempe&ntilde;o es juzgado por pares y donde la influencia proviene de compartir informaci&oacute;n. <br />
Pero la <em>Web</em> tiene sus l&iacute;mites. La colaboraci&oacute;n online, en su estado actual, no sustituye satisfactoriamente las interacciones cara a cara, tan importantes para lograr avances genuinos. No obstante, por primera vez en un siglo, tenemos alternativas viables al statu quo. Gracias a la <em>Web</em>, es posible imaginar organizaciones grandes pero no burocr&aacute;ticas, enfocadas sin ser miopes, eficientes pero no inflexibles y disciplinadas sin despojar de autonom&iacute;a a los empleados. Sin duda, hay motivo para la esperanza. Si se pueden encontrar maneras de trasplantar el ADN de Internet a las organizaciones, los valores de transparencia, colaboraci&oacute;n, meritocracia, apertura, comunidad y autodeterminaci&oacute;n, podr&aacute; existir la posibilidad, por fin, de superar los l&iacute;mites de dise&ntilde;o del <em>Management</em> 1.0<br />
Con esa intenci&oacute;n, Gary Hamel est&aacute; lanzando el <em>Management</em> 2.0 Challenge, la primera pata del premio por innovaci&oacute;n gerencial de <em>Harvard Business Review/McKinsey.</em> &ldquo;Estamos buscando destacar pr&aacute;cticas progresistas e ideas innovadoras que muestren c&oacute;mo se pueden usar los principios y herramientas de la <em>Web</em> para hacer las organizaciones m&aacute;s adaptables, innovadoras, atrayentes y responsables. Lo dejamos en sus manos. Puede compartir con nosotros un caso de estudio o aportar una idea; usted puede ayudar a definir el <em>management</em> de la nueva era. Como premio de este esfuerzo tendremos organizaciones tan humanas como las personas que trabajan en ellas&rdquo;. (http://www.garyhamel.com/)</p>

Compartir:

spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img

Noticias

CONTENIDO RELACIONADO