La colección de correos internos y de entrevistas a empleados presentados en el juicio iniciado por uno de los inversionistas, ofrece una nueva imagen de cómo la máquina hipotecaria de Wall Street amasó millones de títulos de deuda que luego implosionaron. Los documentos revelan que JPMorgan y otras dos firmas que el banco compró durante la crisis de crédito – Washington Mutual y Bear Sterns – saltearon controles de calidad e ignoraron problemas para lograr ganancias.
El juicio lo inició Dexia, un banco belgofrancés que sufrió importantes pérdidas y quien afirma en su demanda que fue embaucado en la compra de US$ 1.600 millones de dólares en títulos respaldados por malas hipotecas.
Los documentos – emails internos en su mayoría – muestran que la compañía estaba en pleno conocimiento de las dificultades y hizo lo posible por esconderlas o minimizarlas. Sin embargo, en audiencias anteriores había negado rotundamente los cargos.
El juicio es seguido con sumo Interés por toda la industria con relación a otro juicio por US$ 200.000 millones que pende sobre 17 bancos. En ese juicio, la Federal Housing Finance Agency los acusa de vender títulos sobre hipotecas dudosas a Fannie Mae y Freddie Mac, las dos grandes asociaciones de préstamos hipotecarios de Estados Unidos. .
En el juicio, Dexia acusa a JPMorgan, Bear Sterns y Washington Mutual de montar un complejo sistema de títulos durante el boom inmobiliario. Al tiempo que aumentaban las ganancias, las firmas de Wall Street corrieron a acaparar más inversiones aun sabiendo que la calidad era dudosa.