HealthSouth finalmente se declara en cese de pagos
HealthSouth, principal operador de clínicas para rehabilitación en EE.UU., se declaró en cese de pagos con algunos días de adelanto. Su problema es una línea de crédito por US$ 1.250 millones, que los acreedores se niegan a renovarle.
La compañía informó que no podrá hacer frente a un pago de intereses por apenas US$ 17.200.000 que vence el martes. En este caso, es un cupón de bonos. Pero, al día siguiente, debiera rescatar deuda por US$ 350 millones. Si, entretanto, la firma no logra negociar una restructuración del pasivo, afrontará la bancarrota.
Las perspectivas son malas. Un grupo de bancos, encabezado por JP Morgan Chase, congeló la semana pasada una línea de crédito (auqellos US$ 1.250 millones) y le ha bloqueado a HealthSouth posibilidades pagar o rescatar deudas en poder de terceros. “Los tenedores de bonos pueden pedir la quiebra de la empresa a partir del miércoles, si no antes”, presumen analistas de la agencia calificadora Standard & Poor’s.
Esta crisis financiera empalma con la crisis judicial de la firma. Hace tres días, William Owens, su director financiero, se declaraba culpable de falsificar estados financieros, confabulado con el CEO, Richard Scrushy, para inflar ingresos en los balances. Tiempo antes, la Securities & Exchange Commission denunciaba irregularidades en sucesivos balances hasta redondear US$ 1.400 millones en el lapso 1999-2001. Vanguard Group, uno de los mayores accionistas, acaba de sumarse a una demanda colectiva contra la empresa y su cúpula.
La compañía informó que no podrá hacer frente a un pago de intereses por apenas US$ 17.200.000 que vence el martes. En este caso, es un cupón de bonos. Pero, al día siguiente, debiera rescatar deuda por US$ 350 millones. Si, entretanto, la firma no logra negociar una restructuración del pasivo, afrontará la bancarrota.
Las perspectivas son malas. Un grupo de bancos, encabezado por JP Morgan Chase, congeló la semana pasada una línea de crédito (auqellos US$ 1.250 millones) y le ha bloqueado a HealthSouth posibilidades pagar o rescatar deudas en poder de terceros. “Los tenedores de bonos pueden pedir la quiebra de la empresa a partir del miércoles, si no antes”, presumen analistas de la agencia calificadora Standard & Poor’s.
Esta crisis financiera empalma con la crisis judicial de la firma. Hace tres días, William Owens, su director financiero, se declaraba culpable de falsificar estados financieros, confabulado con el CEO, Richard Scrushy, para inflar ingresos en los balances. Tiempo antes, la Securities & Exchange Commission denunciaba irregularidades en sucesivos balances hasta redondear US$ 1.400 millones en el lapso 1999-2001. Vanguard Group, uno de los mayores accionistas, acaba de sumarse a una demanda colectiva contra la empresa y su cúpula.
