Es un software preparado para mejorar nuestra “inteligencia fluida”, o sea, la habilidad para razonar rápidamente y resolver problemas nuevos.
La habilidad general para resolver problemas es lo que los científicos llaman “inteligencia fluida”: capacidad para razonar rápidamente y pensar en abstracto. Hasta ahora se pensaba que este tipo de inteligencia decae con la edad y tiene, además, un componente genético. Pero los creadores del software afirman que 25 minutos al día de entrenamiento mental riguroso ayudan a un adulto sano a mejorar sus capacidades mentales.
Los especialistas distinguen entre inteligencia fluida e inteligencia cristalizada. La primera mide la forma en que la gente se adapta a situaciones nuevas y resuelve problemas a los que no se había enfrentado con anterioridad. La “cristalizada”, en cambio, tiene en cuenta conocimientos y destrezas que la persona ya ha adquirido, como vocabulario, gramática o matemáticas.