El 18 de diciembre se llevó a cabo la primera convención del G45, la reunión de un grupo de pequeños productores de vino que se juntaron con la idea de crecer respetando principios claros de lo que significa producir a esa escala de tamaño y de esfuerzos. El origen de este colectivo comenzó en largas charlas entre pequeños productores, bodegueros, enólogos, vinotequeros, restauranters y sommeliers, que durante todo el año debatieron sobre la necesidad imperiosa de generar una convención sin membresías para lograr más solidez frente al poco oxígeno que dejan las grandes bodegas y que genera que a los pequeños les cueste mucho insertarse en los mercados, teniendo vinos de calidad increíble y hechos con mucha pasión y esfuerzo.
El G45 es un conjunto de historias que tienen al vino como protagonista, con la necesidad de compartir experiencias. La reunión sincera entre humanidad, biología, cultura y viñedo.
Los participantes provienen de diferentes puntos y regiones del país como Córdoba, Neuquén, Mendoza y Río Negro y este primer puntapié permitió degustar vinos de 16 bodegas diferentes donde se elaboran pequeñas producciones de vino. Las calificaciones se hicieron a través de la aplicación Pyramidia, un sistema abierto, democrático y fácil de usar que califica a los vinos en una pirámide compartiendo puestos equitativos en los resultados finales, basados en la propia experiencia in situ y alejada de rankings y calificaciones externas. A partir de la degustación llevada a cabo por los pequeños productores presentes se estableció un Directorio conformado por la mayoría de los presentes y algunos otros rankeados dentro del top 10. En el G45 se aceptan solamente dos premisas a partir de la conformación del directorio: se aceptaran en el grupo nuevos productores que elaboren hasta 100 mil litros de vino, siempre reflejando lo pequeño, si el Directorio los acepta. Por otro lado el concepto de la comercialización sigue siendo independiente de cada uno. No se aceptaran bodegas que utilicen estructuras industriales de comercialización y marketing, ya que este grupo persigue todo lo contrario.
Las bodegas presentes en la primera convención fueron Bodega Chacra, Noemía, Finca Blousson, Flia Miras, El Búho, Carmelo Patti, Luna Austral, Escala Humana Wines, Viarago, Desde La Torre, Del Rio Elorza, Videla Dorna, J.Sgrablich, Clos de Chacras, Bonfanti, Hacienda Del Plata, etc.
Esto es apenas el comienzo de futuras acciones ya meditadas. Se trabajará por nodos y regiones del país en simultáneo. Algunos productores de diferentes lugares se hicieron presentes como Mario Toso, de Bodega Luna Austral (Mendoza), Ernesto Catena de Bodega El Búho (Mendoza), Nicolás Jascalevich de Bodega El Noble de San Javier (Córdoba) , Rosario y Juan Pablo González de Bodega Hacienda Del Plata (Mendoza), German Masera de Escala Humana Wines (Mendoza) y Nicolás y Garu De La Torre de Bodega Desde La Torre (Neuquén), además de estar presentes con sus etiquetas las bodegas antes mencionadas.
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