Aderezo en la ensalada

Los trabajadores de la química del cuerpo humano están tratando de desentrañar la manera en que nuestro cuerpo absorbe los nutrientes y compuestos en los alimentos. Al cabo de un primer conjunto de experimentos, concluyen que al quitar la grasa de la dieta, nos privamos de aprovechar elementos benéficos en frutas y verduras. Lo que ocurre es que algunos de los mejores elementos en frutas y verduras – ciertas vitaminas y compuestos que combaten el cáncer – son “solubles en grasa”. Eso quiere decir que algo de grasa tiene que estar presente en el organismo para que los nutrientes puedan ser absorbidos. De manera que cuando se adoptan, para la ensalada, los aderezos sin contenido graso, o cuando se evitan sistemáticamente la palta y el queso en el afán de reducir calorías, se deja de aprovechar todo lo valioso que tiene una ensalada u otros vegetales.

Steve Clinton, líder del programa que estudió la asimilación de una ensalada, opina que cuando la grasa está ausente, muchos nutrientes se pierden y, en consecuencia, la ensalada pierde su valor alimenticio. Sus estudios muestran que al agregar palta – un alimento relativamente alto en grasas no saturadas – a una salsa o a una ensalada — se afecta la forma en que el cuerpo absorbe los compuestos saludables en los alimentos. En particular, Clinton observó la absorción de carotenoides, los pigmentos rojos, amarillos y anaranjados que se encuentran en muchas frutas y verduras y que se supone son capaces de combatir el cáncer.

Para el test de la salsa, el equipo de Clinton dio a 11 personas una comida que incluía pan y salsa sin grasa. Otro día les entregaron la misma comida pero esta vez la salta contenía palta, lo cual aumentó el nivel de grasa y de calorías. Al controlar luego los niveles de sangre en los investigados, se advirtió que el agregado de palta significó una absorción promedio de 4,4 veces más de licopeno y de 2,6 veces más de beta caroteno.

El licopeno es un pigmento vegetal, soluble en grasas, que aporta el color rojo característico a los tomates, sandías, y en menor cantidad a otras frutas y verduras. Pertenece a la familia de los carotenoides y se lo está estudiando como posible arma para combatir varios tipos de cáncer, el de próstata incluido. Beta caroteno (otro carotenoide) es el pigmento anaranjado en frutas y vegetales que el cuerpo humano usa para fabricar vitamina A. Hay estudios que sugieren que las dietas altas en frutas y vegetales que contienen betacaroteno guardan relación con menor incidencia de cáncer.

Con el nuevo test de la ensalada, el impacto de agregar palta fue aun mayor. La primera ensalada tenía lechuga romana, espinaca baby, zanahoria rallada y aderezo sin grasa, con un contenido total de grasa de 2%. Después de agregar palta, el contenido de grasa saltó a 42%. Cuando se consumió la ensalada con palta, las 11 personas de la prueba absorbieron 7 veces más luteína y 18 veces más beta caroteno. La luteína es un pigmento de la familia de los carotenoides que se encuentra en muchos vegetales verdes y que está relacionada según estudios con una buena salud ocular y cardiaca.

Hasta ahora, no hay suficientes estudios como para aconsejar a la gente cuánta grasa debe consumir para una óptima absorción de carotenoides, La consejo básico es seguir contando calorías y no exagerar grasas, eligiendo las grasas no saturadas (benéficas) como la palta o el aceite de oliva en lugar de comidas con alto contenido en grasas saturadas.

Un estudio reciente realizado en ratas por investigadores alemanes mostró que el tipo de grasa es importante. Compararon la absorción de vitamina E en ratas alimentadas a dietas con aceite de semillas de algodón – que contienen nocivas trans grasas. Las trans grasas demoraban la absorción de la vitamina E en comparación con otro tipo de grasa.
Para las personas que cuidan su peso y el contenido de grasa en su dieta, el tema puede ser traicionero. La mejor absorción de nutrientes que se obtuvo de una ensalada, por ejemplo, ocurrió cuando los comensales consumieron un aderezo con 28 gramas (dos cucharadas) de aceite de colza. Esto se traduce en 250 calorías adicionales.

Los nutricionistas dicen que la gente debe tener en cuenta el contenido total de grasa en una comida. Un bol de cereal con frutillas o frambuesas puede mejorarse usando 2% de leche entera o yogur entero en lugar leche descremada. Pero si lo que se planea es una comida, los dietistas aconsejas elegir un alimento por comida que tenga una cantidad significativa de grasa, y mantener todos los demás alimentos con muy bajo contenido graso.

Los trabajadores de la química del cuerpo humano están tratando de desentrañar la manera en que nuestro cuerpo absorbe los nutrientes y compuestos en los alimentos. Al cabo de un primer conjunto de experimentos, concluyen que al quitar la grasa de la dieta, nos privamos de aprovechar elementos benéficos en frutas y verduras. Lo que ocurre es que algunos de los mejores elementos en frutas y verduras – ciertas vitaminas y compuestos que combaten el cáncer – son “solubles en grasa”. Eso quiere decir que algo de grasa tiene que estar presente en el organismo para que los nutrientes puedan ser absorbidos. De manera que cuando se adoptan, para la ensalada, los aderezos sin contenido graso, o cuando se evitan sistemáticamente la palta y el queso en el afán de reducir calorías, se deja de aprovechar todo lo valioso que tiene una ensalada u otros vegetales.

Steve Clinton, líder del programa que estudió la asimilación de una ensalada, opina que cuando la grasa está ausente, muchos nutrientes se pierden y, en consecuencia, la ensalada pierde su valor alimenticio. Sus estudios muestran que al agregar palta – un alimento relativamente alto en grasas no saturadas – a una salsa o a una ensalada — se afecta la forma en que el cuerpo absorbe los compuestos saludables en los alimentos. En particular, Clinton observó la absorción de carotenoides, los pigmentos rojos, amarillos y anaranjados que se encuentran en muchas frutas y verduras y que se supone son capaces de combatir el cáncer.

Para el test de la salsa, el equipo de Clinton dio a 11 personas una comida que incluía pan y salsa sin grasa. Otro día les entregaron la misma comida pero esta vez la salta contenía palta, lo cual aumentó el nivel de grasa y de calorías. Al controlar luego los niveles de sangre en los investigados, se advirtió que el agregado de palta significó una absorción promedio de 4,4 veces más de licopeno y de 2,6 veces más de beta caroteno.

El licopeno es un pigmento vegetal, soluble en grasas, que aporta el color rojo característico a los tomates, sandías, y en menor cantidad a otras frutas y verduras. Pertenece a la familia de los carotenoides y se lo está estudiando como posible arma para combatir varios tipos de cáncer, el de próstata incluido. Beta caroteno (otro carotenoide) es el pigmento anaranjado en frutas y vegetales que el cuerpo humano usa para fabricar vitamina A. Hay estudios que sugieren que las dietas altas en frutas y vegetales que contienen betacaroteno guardan relación con menor incidencia de cáncer.

Con el nuevo test de la ensalada, el impacto de agregar palta fue aun mayor. La primera ensalada tenía lechuga romana, espinaca baby, zanahoria rallada y aderezo sin grasa, con un contenido total de grasa de 2%. Después de agregar palta, el contenido de grasa saltó a 42%. Cuando se consumió la ensalada con palta, las 11 personas de la prueba absorbieron 7 veces más luteína y 18 veces más beta caroteno. La luteína es un pigmento de la familia de los carotenoides que se encuentra en muchos vegetales verdes y que está relacionada según estudios con una buena salud ocular y cardiaca.

Hasta ahora, no hay suficientes estudios como para aconsejar a la gente cuánta grasa debe consumir para una óptima absorción de carotenoides, La consejo básico es seguir contando calorías y no exagerar grasas, eligiendo las grasas no saturadas (benéficas) como la palta o el aceite de oliva en lugar de comidas con alto contenido en grasas saturadas.

Un estudio reciente realizado en ratas por investigadores alemanes mostró que el tipo de grasa es importante. Compararon la absorción de vitamina E en ratas alimentadas a dietas con aceite de semillas de algodón – que contienen nocivas trans grasas. Las trans grasas demoraban la absorción de la vitamina E en comparación con otro tipo de grasa.
Para las personas que cuidan su peso y el contenido de grasa en su dieta, el tema puede ser traicionero. La mejor absorción de nutrientes que se obtuvo de una ensalada, por ejemplo, ocurrió cuando los comensales consumieron un aderezo con 28 gramas (dos cucharadas) de aceite de colza. Esto se traduce en 250 calorías adicionales.

Los nutricionistas dicen que la gente debe tener en cuenta el contenido total de grasa en una comida. Un bol de cereal con frutillas o frambuesas puede mejorarse usando 2% de leche entera o yogur entero en lugar leche descremada. Pero si lo que se planea es una comida, los dietistas aconsejas elegir un alimento por comida que tenga una cantidad significativa de grasa, y mantener todos los demás alimentos con muy bajo contenido graso.