Luego de conocerse la noticia las acciones de Petrobras cayeron 4,9% al cierre de las operaciones de la bolsa de San Pablo antes de estabilizarse en 4,52%.
La presidenta de Brasil Dilma Rousseff, cuyo Partido de los Trabajadores se ha visto atrapado en un escándalo de corrupción, minimizó la baja de la calificación diciendo que muestra “una falta de conocimiento directo sobre lo que está pasando en Petrobras”.
“No tengo dudas de que Petrobras será una compañía con gran capacidad de recuperación”, dijo a la prensa.
Hasta hace poco, Petrobras, la compañía más grande de Brasil, era considerada también la mejor y más prestigiosa. Pero Moody’s le bajó la nota de Baa3 a Ba2, el segundo escalón en la categoría basura.
Es la cuarta vez que Moody’s baja la calificación a Petrobras desde octubre. Además, ha advertido a la petrolera que sigue en observación y que podría haber otra descalificación.