<p><strong>Digerir el cambio</strong><br />
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El negocio del software está sufriendo enormes cambios, pero las fuerzas más desestabilizadoras son la distribución y la suscripción, según opinan algunos expertos de Wharton. Lo que ocurre, dicen, es que el sistema de licencias y actualizaciones no se ve como eficiente. Paquetes como el Microsoft Office ya no tienen sentido pues la gente no quiere que estar actualizando constantemente. <br />
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Los grandes vendedores han entendido el mensaje y están intentando que su mercadería sea fácil de digerir. SAP anunció que dará acceso a las actualizaciones incrementales por suscripción. En la conferencia anual de Open World, el CEO de Oracle, Larry Ellison anunció planes de dedicarse a servicios en la nube. Adobe también está desarrollando un nuevo modelo de distribución para su Creative Suite, que incluye Photoshop y otras herramientas para creación de contenido. <br />
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Microsoft también se subió al tren de la cloud computing. Durante la última reunión financiera de la compañía, el CEO Steve Ballmer dijo que la empresa “apuesta a la nube” y que la mayoría de los productos se podrán adquirir como servicio. Por ejemplo, cobrarán US$ 6 por mes a cada usuario de su Office 365 si son empresas pequeñas; compañías más grandes pagarán US$ 24<br />
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Esta democratización del software es una tendencia declarada pero llevará años antes de que se instale como modelo triunfante, opinan expertos en Wharton. El tema está en quiénes serán los que consigan cobrar más por sus “servicios”<br />
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<p><em>Cloud computing</em> está cambiando no sólo la forma en que los usuarios acceden a aplicaciones de software sino que está cambiando el modelo en que se paga el software. Están desapareciendo rápidamente los días en que los paquetes de software se vendían en cajas con una licencia que se pagaba una vez y a perpetuidad. Ahora la gente y las empresas se inclinan cada vez más hacia los modelos de suscripción y están comprando sólo las aplicaciones que necesitan para tareas especiales en lugar de aquellos conjuntos de programas para todo propósito.<br />
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Mientras tanto, los gigantes del software, que tradicionalmente confiaban en el modelo de la caja, están tratando de entender otros modelos de pago de software que podrían hacer peligrar su lucrativa forma de hacer negocio. Microsoft ya ofrece versiones para suscripción de su software bajo su marca de cloud computing Azure; además, en junio de este año lanzó Office 365, una versión online de su conjunto de programas Office. Adobe tiene planes de ofrecer Photoshop y las otras aplicaciones en su Creative Suite por suscripción a través de su Creative Cloud. El mes pasado, Oracle anunció planes de comprar RightNow Technologies, que hace software para servicio al cliente y lo entrega online.<br />
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Computación en la nube es un término amplio que habla de tecnología entregada como servicio a través de Internet. Los usuarios no instalan las aplicaciones en sus propias computadoras sino que el programa es alojado en otra parte y a él se accede a través de un navegador web y por lo general se alquila bajo un modelo de suscripción. En lugar de mantener servidores y centros de datos, las empresas pueden alquilar la infraestructura de computación de Amazon.com por algunos centavos la hora, como si fuera un servicio cualquiera. <br />
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A diferencia de los modelos tradicionales en los que el software se compraba en una caja, los modelos nube se basan en pagos mensuales y los clientes se pueden retirar en cualquier momento. Los modelos tradicionales requieren instalación física y un gasto inicial importante. Una vez instalado, los vendedores del software pueden cobrar una cuota anual de mantenimiento o soporte y esperan que los usuarios paguen las futuras actualizaciones. <br />
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Los tradicionales paquetes de, por ejemplo, Oracle, SAP y Microsoft tienen ahora la competencia de servicios que entregan lo suyo en forma más económica a través del navegador web. Un ejemplo: una empresa con 5.000 empleados tendría que pagar US$ 28,22 mensuales por cada uno por el uso de Exchange, el programa de correo de Microsoft, según cálculos de Forrester. La misma empresa tendría que pagar sólo US$ 8,59 al mes por todo el paquete Google, que incluye correo, calendario y aplicaciones de productividad, junto con soporte técnico.<br />
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