<p>En un laboratorio de Hamburgo, un grupo de científicos ha creado el material más liviano del mundo. Es un nanomaterial de carbono llamado Aerografito que pesa 0,2 miligramos por centímetro cúbico. Eso es menos de un cuarto el peso del último récord, logrado por micromaterial de níquel y fósforo creado por investigadores estadounidenses el año pasado. Además es seis veces más liviano que el aire. <br />
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Investigadores en nanotecnología vienen trabajando desde hace años con nanotubos de carbono que, como sugiere el nombre, son tubos muy pero muy pequeños formados por átomos de carbono. La idea es construir con ellos tito tipo de cosas súper livianas, desde bicicletas hasta implantes para medicina. El equipo alemán, que trabaja en las universidades de hamburgo y Kiel, averiguó cómo construir una red de tubos ramificados que al entrelazarse forman un material más fuerte y mejor conductor de la electricidad, dos cualidades de gran utilidad en electrónica. La extrema liviandad fue un regalo inesperado. <br />
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El aerografito se creó bombeando gas carbono dentro de un horno donde se lo recubre con una retícula de moléculas de óxido de zinc. Luego bombearon gas hidrógeno dentro del horno que se fundió con el oxígeno en el zinc para formar agua; luego se evaporó el agua y el zinc se convirtió en gas. Lo que quedó es una red hueca de tubos de carbono. <br />
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El aerografito tiene una consistencia espumosa, por eso es difícil imaginar fabricar con él áutos de carrera para fórmula uno o aviones caza. Debido a su extraordinaria liviandad y fortaleza, además de la posibilidad de ser comprimido y de su capacidad para conducir electricidad, sus creadores creen que puede ser usado para crear mejores baterías que las actuales y otros componentes eléctricos como supercapacitores. El uso del aerografito eliminaría peso, obviamente, pero más importante para las fuentes de energía, agregaría energía. <br />
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Un centímetro cúbico de aerografito es 99,99% agua y tal vez lo más extraño es que todo ese aire en realidad hace más pesado el material. Normalmente las cosas son liviandas porque son aireadas, como ocurre con el telgopor o la espuma de caramelo. No así con el aerografito, cuyos nanotubos de carbono son en realidad menos densos que las moléculas en un centímetro cúbico de aire (seis veces menos). Es el aire en el aerografito lo que le impide al material irse para arriba con un globo de helio.</p>
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Un material más liviano que el aire
Seis veces más liviano que el aire.El descubrimiento puede tener vital importancia para la industria electrónica del futuro. También servirá para mejorar baterías e infinidad de componentes eléctricos.
