Sorpresa: Apple deja IBM y se junta con Intel. Nervios en Microsoft
Las tropas de William Gates no tienen paz. Inesperadamente, Apple abandona la alianza con IBM, en favor de un acuerto con Intel. Objeto: otra generación de PC.
27 junio, 2005
La bomba la largó el “New York Times”, ganándole de mano al “Wall Street Journal”. Con su estilo algo transgresor, Steve Jobs sorprendió a International Business Machines –con quien comparte una accidentada historia de veinticinco años- deshaciendo de pronto adiós una alianza iniciada en 1991. Tampoco los adictos a Aplle estaban preparados.
Sea como fuete, las futuras computadoras Mac incorporarán microprocesadores Intel. Si bien circulaban vagos rumores desde hace cuatro semanas (inclusive varios “blogs”), nadie sabe a ciencia cierta cuáles son los móviles finales de Jobs para emprenderla contra una combinación tan “pesada” como Wintel, entre Windows –o sea, Gates- e Intel.
Ahora bien ¿a qué apuntaría una eventual “MacIntel”? Al respecto, analistas y desarrolladores creen que Apple le plantea un desafío directo a Microsoft. No tanto en PC, cuanto en el segmento de equipos para entrenimientos digitales para la familia. Un negocio que –sospechan allegados a Gates- se acerca velozmente a la madrurez, si no a la saturación de oferta y la caída de precios (o sea, rentabilidad).
Ese se desprende de recientes contactos entre Sony y Jobs. El gigante japonés intentaba convencer a Apple de que adoptase un semiconductor que IBM está desarrollando para PlayStation 3. Un procesador Intel puesto en la Macintosh acercaría a los usuarios una vasta gama de juegos y programas que corren sobre Windows. Por lo menos, eso beneficiaría a quienes estuviesen dispuestos a intalar un segundo sistema operativo (¿Linux?).
Riesgos hay. En particular uno: la alianza con Intel podría inducir a una cantidad relevante de usuarios de Apple a dejar de comprar Mac con chips IBM y esperar sistemas más potentes con micropocedadoress Intel, anunciadps días atrás para 2006. Al cabo, se trata de aplicaciones no relacionadas con trabajo o producción, sino con entretemientos para horas de ocio.
La bomba la largó el “New York Times”, ganándole de mano al “Wall Street Journal”. Con su estilo algo transgresor, Steve Jobs sorprendió a International Business Machines –con quien comparte una accidentada historia de veinticinco años- deshaciendo de pronto adiós una alianza iniciada en 1991. Tampoco los adictos a Aplle estaban preparados.
Sea como fuete, las futuras computadoras Mac incorporarán microprocesadores Intel. Si bien circulaban vagos rumores desde hace cuatro semanas (inclusive varios “blogs”), nadie sabe a ciencia cierta cuáles son los móviles finales de Jobs para emprenderla contra una combinación tan “pesada” como Wintel, entre Windows –o sea, Gates- e Intel.
Ahora bien ¿a qué apuntaría una eventual “MacIntel”? Al respecto, analistas y desarrolladores creen que Apple le plantea un desafío directo a Microsoft. No tanto en PC, cuanto en el segmento de equipos para entrenimientos digitales para la familia. Un negocio que –sospechan allegados a Gates- se acerca velozmente a la madrurez, si no a la saturación de oferta y la caída de precios (o sea, rentabilidad).
Ese se desprende de recientes contactos entre Sony y Jobs. El gigante japonés intentaba convencer a Apple de que adoptase un semiconductor que IBM está desarrollando para PlayStation 3. Un procesador Intel puesto en la Macintosh acercaría a los usuarios una vasta gama de juegos y programas que corren sobre Windows. Por lo menos, eso beneficiaría a quienes estuviesen dispuestos a intalar un segundo sistema operativo (¿Linux?).
Riesgos hay. En particular uno: la alianza con Intel podría inducir a una cantidad relevante de usuarios de Apple a dejar de comprar Mac con chips IBM y esperar sistemas más potentes con micropocedadoress Intel, anunciadps días atrás para 2006. Al cabo, se trata de aplicaciones no relacionadas con trabajo o producción, sino con entretemientos para horas de ocio.