En 1996 nació la Palm como un organizador con marca Pilot. Luego la empresa fue comprada por US Robotics y luego, por 3Com. Frustrados por todo el proceso, los fundadores de Palm renunciaron y fundaron la rival Handspring. En el capítulo siguiente 3Com separó el negocio de la Palm para instalarlo como entidad independiente una vez más, pero poco más tarde éste se subdividió en dos empresas: PalmOne ( de hardware) y Palmsource (de software). Un capítulo más y Handspring, en problemas, volvió a fusionarse con Palm.
En la última entrega de esta saga, PalmOne recuperó el nombre Palm de PalmSource, cuyos problemas son tantos que muchos dudan de su futuro. Para finales de año, Palm volverá a llamarse Palm.
Pero en todo este proceso fue apareciendo un personaje, primero menor pero luego, gradualmente, fue adquiriendo prominencia: el teléfono inteligente Treo. Como su nombre lo indica, Treo nació con el triple objetivo de combinar organizador, teléfono celular y terminal de bolsillo para conexiones de Internet. Palm, luego de la serie de casamientos y divorcios que la asolaron, ahora cree que su futuro está con el Treo. Entonces, ahora que es evidente que el mercado para los organizadores se ha enfriado, la empresa anunció que está “girando su foco de interés hacia el espacio de los teléfonos inteligentes.”
El último modelo, el Treo 650, salió en noviembre y generó algunas insatisfacciones. En primer lugar porque sólo se podía conseguir a través de Sprint y más tarde de Cingular. Además, se suponía que ofrecería tecnología inalámbrica Bluetooth (que convierte a un teléfono celular en módem de conexión a Internet) pero Sprint y Cingular le desactivaron esa capacidad. Finalmente, trajo problemas de incompatibilidad de memoria que solucionó luego de muchas protestas.
Pero frente a rivales más nuevas y más agresivas, la Treo 650 ya no tiene la última tecnología. No tiene enlace inalámbrico Wi-fi, de manera que en aeropuertos o en cafeterías no se puede conectar a Internet. Tampoco se conecta a la velocidad de un cable módem, como la nueva Samsung i730.
Aunque la cámara Treo saca mejores fotos que su antecesora, la calidad es muy inferior a lo que hoy se ha vuelto normal. La capacidad Bluetooth tampoco está desarrollada al máximo. Pero la realidad está demostrando que su éxito no depende de una larga lista de capacidades tecnológicas. Su éxito depende de su diseño, que es muy elegante y sólido. Su pantalla es de 320 por 320 píxeles con hermosos colores brillantes y mejor resolución que muchas rivales.
En 1996 nació la Palm como un organizador con marca Pilot. Luego la empresa fue comprada por US Robotics y luego, por 3Com. Frustrados por todo el proceso, los fundadores de Palm renunciaron y fundaron la rival Handspring. En el capítulo siguiente 3Com separó el negocio de la Palm para instalarlo como entidad independiente una vez más, pero poco más tarde éste se subdividió en dos empresas: PalmOne ( de hardware) y Palmsource (de software). Un capítulo más y Handspring, en problemas, volvió a fusionarse con Palm.
En la última entrega de esta saga, PalmOne recuperó el nombre Palm de PalmSource, cuyos problemas son tantos que muchos dudan de su futuro. Para finales de año, Palm volverá a llamarse Palm.
Pero en todo este proceso fue apareciendo un personaje, primero menor pero luego, gradualmente, fue adquiriendo prominencia: el teléfono inteligente Treo. Como su nombre lo indica, Treo nació con el triple objetivo de combinar organizador, teléfono celular y terminal de bolsillo para conexiones de Internet. Palm, luego de la serie de casamientos y divorcios que la asolaron, ahora cree que su futuro está con el Treo. Entonces, ahora que es evidente que el mercado para los organizadores se ha enfriado, la empresa anunció que está “girando su foco de interés hacia el espacio de los teléfonos inteligentes.”
El último modelo, el Treo 650, salió en noviembre y generó algunas insatisfacciones. En primer lugar porque sólo se podía conseguir a través de Sprint y más tarde de Cingular. Además, se suponía que ofrecería tecnología inalámbrica Bluetooth (que convierte a un teléfono celular en módem de conexión a Internet) pero Sprint y Cingular le desactivaron esa capacidad. Finalmente, trajo problemas de incompatibilidad de memoria que solucionó luego de muchas protestas.
Pero frente a rivales más nuevas y más agresivas, la Treo 650 ya no tiene la última tecnología. No tiene enlace inalámbrico Wi-fi, de manera que en aeropuertos o en cafeterías no se puede conectar a Internet. Tampoco se conecta a la velocidad de un cable módem, como la nueva Samsung i730.
Aunque la cámara Treo saca mejores fotos que su antecesora, la calidad es muy inferior a lo que hoy se ha vuelto normal. La capacidad Bluetooth tampoco está desarrollada al máximo. Pero la realidad está demostrando que su éxito no depende de una larga lista de capacidades tecnológicas. Su éxito depende de su diseño, que es muy elegante y sólido. Su pantalla es de 320 por 320 píxeles con hermosos colores brillantes y mejor resolución que muchas rivales.