Además, la empresa implementó un mecanismo para que los socios puedan
evitar a Beacon, que sigue la pista de las acciones de sus socios cuando usan
otros sitios en Internet.
La disculpa de Zuckerberg – en forma de publicación en el blog de Facebook
– se produjo luego de semanas de críticas de usuarios, grupos que luchan
por la privacidad y anunciantes. También se reunió con agencias
de publicidad para discutir los problemas que surgieron con la introducción
del programa.
Zuckerberg había presentado Beacon
a la comunidad publicitaria como un programa “opt-in” que
los usuarios decidirían usar. Planeaba vender avisos junto con los mensajes
que enviaba la gente a sus amigos sobre sus compras y actividades en otros sitios.
Algunos anunciantes, como Coca-Cola expresaron sorpresa al saber que Beacon luego
pedía a los usuarios que activamente manifestaran si no querían
que se enviaran sus mensajes.
Por su parte, los anunciantes dijeron que no querían que Facebook fuerce
a los usuarios a usar un sistema como Beacon contra su voluntad.
Pero eso fue justamente lo que ocurrió durante varias semanas desde el
6 de noviembre, cuando la página puso dos carteles diciendo que planeaba
publicar las acciones de sus usuarios con sus amigos. Al principio los carteles
eran pequeños y los usuarios no los advirtieron. La compañía
supuso que los usuarios le habían otorgado permiso.
Después de una petición con más de 50.000 firmas promovida
por el grupo político MoveOn.org Civic Action, Facebook cambió
su política y ahora interpreta que los que no responden al aviso han dicho
que “no”.
Sin embargo, un ejecutivo de la compañía dijo que no ofrecerían
a los usuarios un opt-out universal (posibilidad de autoexcluirse universal).
“Queremos darles la posibilidad de ver lo que las cosas les pueden ofrecer”,
dijo el vicepresidente de marketing Chamath Palihapitiya.
Además, la empresa implementó un mecanismo para que los socios puedan
evitar a Beacon, que sigue la pista de las acciones de sus socios cuando usan
otros sitios en Internet.
La disculpa de Zuckerberg – en forma de publicación en el blog de Facebook
– se produjo luego de semanas de críticas de usuarios, grupos que luchan
por la privacidad y anunciantes. También se reunió con agencias
de publicidad para discutir los problemas que surgieron con la introducción
del programa.
Zuckerberg había presentado Beacon
a la comunidad publicitaria como un programa “opt-in” que
los usuarios decidirían usar. Planeaba vender avisos junto con los mensajes
que enviaba la gente a sus amigos sobre sus compras y actividades en otros sitios.
Algunos anunciantes, como Coca-Cola expresaron sorpresa al saber que Beacon luego
pedía a los usuarios que activamente manifestaran si no querían
que se enviaran sus mensajes.
Por su parte, los anunciantes dijeron que no querían que Facebook fuerce
a los usuarios a usar un sistema como Beacon contra su voluntad.
Pero eso fue justamente lo que ocurrió durante varias semanas desde el
6 de noviembre, cuando la página puso dos carteles diciendo que planeaba
publicar las acciones de sus usuarios con sus amigos. Al principio los carteles
eran pequeños y los usuarios no los advirtieron. La compañía
supuso que los usuarios le habían otorgado permiso.
Después de una petición con más de 50.000 firmas promovida
por el grupo político MoveOn.org Civic Action, Facebook cambió
su política y ahora interpreta que los que no responden al aviso han dicho
que “no”.
Sin embargo, un ejecutivo de la compañía dijo que no ofrecerían
a los usuarios un opt-out universal (posibilidad de autoexcluirse universal).
“Queremos darles la posibilidad de ver lo que las cosas les pueden ofrecer”,
dijo el vicepresidente de marketing Chamath Palihapitiya.