El Correo Argentino entró en convocatoria
¿Sin salida?
Con un pasivo de $ 763 millones, Correo Argentino pidió su concurso preventivo de acreedores el 19 de septiembre, luego de cuatro años de concesión. A cargo del grupo Macri, las deudas de la compañía para con el Estado suman alrededor de $ 253 millones, correspondientes al pago de las últimas cinco cuotas de canon que la empresa no abona desde 1999. Otro tanto sería la cifra que el Correo adeuda a distintos bancos entre los cuales figura el Galicia, que posee 12,5% de la compañía.
Luego de ganar una licitación en la que ofreció pagar $ 103,2 millones anuales en concepto de canon, el grupo Macri se hizo cargo de la administración del correo oficial en 1997. La empresa pagó las primeras cuatro cuotas semestrales, hasta septiembre de 1999. A partir de esa fecha comenzaron sus enfrentamientos con el Estado que, a su vez, dejó de pagar por sus servicios. La compañía asegura que municipios, provincias y el Estado nacional le adeudan US$ 112 millones.
Según las disposiciones legales vigentes, la convocatoria de acreedores no impide el funcionamiento normal de la empresa que solicita la medida. De acuerdo con la ley, el pedido de la compañía habilita, además, a una refinanciación de la deuda que la empresa mantiene con el Estado, que podría derivar en una posible quita. No obstante, la justicia también puede decidir la rescisión de la concesión, según lo estipula el contrato homologado entre las partes cuatro años atrás.
ING vende Amsa al grupo Fraomeni
SPM compra y lidera
Aetna Amsa, división de medicina prepaga del grupo de servicios financieros holandés ING, fue vendida a la prestadora Sistemas de Protección Médica (SPM), propiedad del grupo Fraomeni, que en junio pasado compró al Exxel Group las marcas Tim y Galeno-Life. Dueño, además, de las prepagas Ceprimed y Mediplan, y de los sanatorios de la Trinidad Palermo, Quilmes, Dupuytren y San Isidro, el holding argentino suma con esta adquisición al Sanatorio Mitre.
La transacción de la cual se desconocen detalles aún se encuentra sujeta a la aprobación de las autoridades, quienes evalúan si contradicen de alguna manera las disposiciones vigentes en lo que se refiere a defensa de la competencia. De concretarse, el grupo local se posicionaría como el mayor jugador en el negocio de la salud en la Argentina, con más de 400.000 afiliados (que incluyen los 250.000 de Amsa) y una facturación anual de US$ 600 millones.
Según trascendió, SPM consiguió cristalizar su oferta a través de un crédito otorgado por un grupo de bancos encabezado por el BNL. Aunque no se conoce el monto de la operación, el empresario Julio Fraomeni quien además es médico cirujano manifestó que la cifra “está muy por debajo” de los US$ 90 millones pretendidos originalmente por ING, que decidió desprenderse de la prepaga para concentrarse en su negocio tradicional (seguros y banca corporativa). Amsa, cuya facturación ascendió a US$ 150 millones durante el 2000, y tendría deudas por US$ 10 millones.