<p>El segundo guarismo equivale más o menos a 10% de la población activa.<br />
A juicio del economista, el empresario y varios más –entre ellos George Soros-, la crisis sistémica de 2007/09 y la recesión consiguiente no apunta ya a un fenómeno de perfil W (dos pisos, tres picos), sino a algo que Feldstein no quiere nombrar: una depresión similar a la de 1930/5 y su recidiva de 1937/8.<br />
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Desde hace una semana, el conservador Feldstein vislumbra un fenómeno parcialmente similar al de entonces. Por supuesto, los números aún no llegan a esos extremos. Entonces, se acumuló 36% de caída en el producto bruto interno a precios constantes, como recuerdan dos libros de John Kenneth Galbraith.<br />
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En aquel momento, tres jinetes acudieron al rescate: Franklin D.Roosevelt, John Maynard Keynes y, desde 1941, la Segunda guerra mundial. En la actualidad, Barack Obama dista de ser un FDR, no hay ningún funcionario parecido a Keynes y, afortunadamente, no está Adolf Hitler.<br />
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Sí existen puntos de contacto en un ámbito socialmente explosivo en vísperas de año electoral: el desempleo. En 1933 tocó 25% y recién cedió a 10% -la cifra actual- en 1942. Ahora bien, Feldstein sostiene que las estadísticas de hoy no se comparan todavía con aquéllas. Pero Joseph Stiglitz (Nobel 2001) y Paul Krugman (Nobel 2008) afirman que, por el contrario, el desempleo real se halla peligrosamente cerca.<br />
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Básicamente, mientras la depresión de los años 30 se tomó ocho años para sumar 25 millones de desocupados, esta recesión necesitó apenas cinco para sumar 29 millones entre desempleados y gente que ya ni busca trabajo. Si la Eurozona no da señales de haberlo notado, es porque el 21% de España tapa el horizonte.</p>
{Macroeconomía} Desempleo, clave real: 29 millones en la calle
Más allá de la deuda, hay una bomba de tiempo más grave en Estados Unidos. Según Martin Feldman (economista) y Scott Davis (United Parcel Service), 14 millones están sin trabajo y quince ya no lo buscan. El primero augura una recesión parecida a los años treinta.
