Es un hecho admitido por su presidente: el banco creó a lo largo de varios años cuentas y tarjetas de crédito fantasmas que le generaban ingresos sin el conocimiento de los clientes. El número uno del banco deslinda responsabilidades y provoca la furia de los legisladores.
“Para usted responsabilidad quiere decir poner la culpa en sus subordinados quienes no tienen, como usted, dinero para pagar una costosa firma de Relaciones Públicas que los defienda”, espetó la senadora Elizabeth Warren a John Stumpf, presidente del Wells Fargo.
Stumpf, acusado de manejar una estafa millonaria, fue citado a Washington después que los reguladores descubrieron que el personal del banco había creado 2 millones de cuentas fantasma. “La única manera de que Wall Street cambie es que sus ejecutivos vayan a la cárcel cuando presiden fraudes masivos”, dijo indignada la senadora.
Stumpf pidió disculpas a los clientes por más de dos millones de cuentas falsas abiertas en su nombre pero negó rotundamente que el la gerencia del banco hubiera orquestado un fraude masivo
En su testimonio ante la comisión de bancos del senado, Stumpf dijo también que el banco va a aumentar las revisiones internas de las cuentas. Tuvo que afrontar también la indignación de Carrie Tolstedt, jefa de la división donde se crearon las cuentas falsas, quien deberá retirarse por “no haber hecho lo suficiente para solucionar el problema: Se va, sin embargo, con US$ 124 millones en acciones y opciones del banco minorista.