Fueron presentados los resultados de una investigación realizada entre Gerentes y Directores de RRHH de 296 empresas de Argentina, España, México y Portugal sobre acciones, preocupaciones y aprendizajes frente al COVID-19.
Frente a la pandemia que estamos atravesando mundialmente, el profesor Julián I. Irigoin de IAE Business School, presentó los resultados de una encuesta de la que participaron Gerentes y Directores de RR.HH de 296 empresas, de entre menos de 50 empleados y más de mil, de Argentina, España, México y Portugal, sobre cuáles son sus aprendizajes y preocupaciones frente al COVID-19.
La investigación se hizo con IAE Business School en nuestro país y con DCH (Organización Internacional de Directivos de Capital Humano) en los otros tres países.
Al ser consultados sobre los aprendizajes que les deja el paso de esta pandemia por sus respectivos países, el 90% coincide en que el “Home Office” estará entre sus principales aprendizajes. El 59% de los encuestados reconoce no tener a ninguno de sus colaboradores trabajando de manera remota antes del COVID19 y hoy, el 99,7 % de ellos tiene a alguno de sus trabajadores bajo este formato. “En los cuatro países hubo un fenomenal esfuerzo por adaptarse rápidamente a nuevas modalidades de trabajo” dijo Irigoin. Llama la atención que el 74% de los directivos en México muestra que todos o la mayoría de los empleados están trabajando desde sus casas.
El segundo aprendizaje que señalaron está relacionado a la anticipación y preparación frente a crisis futuras y en tercer lugar se ubica la necesidad de ser más ágiles, innovadores, creativos y flexibles.
Los resultados comparativos se muestran similares en algunos puntos, pero con amplias diferencias en otros. Mientras el 87% de los directivos de recursos humanos de Argentina se manifiesta preocupado o extremadamente preocupado por el corte en la cadena de pagos, el 43% lo hace en Portugal, cifra similar a la que se registra en España. Otros resultados llamativos muestran que el 58% de las empresas encuestadas en España cree que no hará reducción de personal, mientras que en el resto de los países plantean un escenario más complicado.
Toma de decisiones
La investigación buscó también dar luz sobre el proceso de toma de decisiones en estos momentos y concluyó que en el 62% de las empresas las medidas relativas al personal se están tomando de manera compartida, ya sea por el Comité ejecutivo (29%) o por el comité de crisis (34%).
España y México son los países en donde más decide un comité de crisis, en Portugal quien más decide es el CEO o dueño y en Argentina lo hace el comité ejecutivo. En el caso de las Pymes de menos de 100 empleados, el 42% señaló que las decisiones finales son tomadas por el dueño.
Con algunos matices, los directivos de recursos humanos de los cuatro países comparten preocupaciones, aunque en distinto grado. Es unánime la preocupación por la caída de ventas, esperada por el 91%, pero en Portugal solo el 29% se manifiesta extremadamente preocupado en este punto. Por otro lado, un 19% de las empresas encuestadas tienen a la mitad o más de sus empleados sin poder trabajar.
Respecto a la pregunta referida a las herramientas con las que mantienen el contacto con los empleados que no están trabajando o que lo hacen de manera remota, el 33% indicó Whatsapp y celular, el 26% email, un 18% señaló Microsoft Teams, 8% Zoom, 9% Skype, 4% G Suite y 2% el intranet de sus respectivas compañías.
En México es donde más se está usando Whatsapp y menos el mail; en el caso de Argentina, es el país de los encuestados en el que más se utiliza Zoom, mientras que en Europa está más extendido el uso de Microsoft Teams.
Otro de los hallazgos es que en el caso de Argentina el 41% reconoció no tener un protocolo escrito en el caso de que alguno de sus empleados o familias resulte contagiado de coronavirus, mientras que en el resto de los países pareciera ser una práctica más difundida.
“Es probable que los cambios en las modalidades de trabajo conlleven a nuevos modelos organizacionales y replanteos de estructuras. Recursos Humanos debería aportar en este punto a la dirección general, así como también gestionar los aprendizajes de la experiencia forzada del home office. La buena noticia es que casi el 40%, pese a todo, dice sentirse esperanzado”, concluye Irigoin.