Italia y España bien, en pruebas que son dudosas

Los principales bancos privados de ambas penínsulas emergieron bien de ensayos que, por otra parte, no convencen a Moody’s Investors Service, Standard & Poor’s ni Fitch Ratings. Pero quizás alivien las presiones especulativas de los mercados.

18 julio, 2011

<p>La Autoridad Europea de Banca (AEB), que llev&oacute; a cabo las pruebas, detect&oacute; &ldquo;apenas&rdquo; 2.500 millones de capital que aportar en ocho entidades. Durante el fin de semana, estos resultados fueron objeto de diversas cr&iacute;ticas. En general, porque &ndash;como en 2010- no fueron lo bastante rigurosos, m&aacute;xime mientras crisis de solvencia castigan a Grecia y Portugal.<br />
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Una novena instituci&oacute;n, la alemana Helaba Landesbank, tambi&eacute;n fracas&oacute;. Pero se niega a divulgar resultados y otros datos del examen. Entretanto, el buen desempe&ntilde;o de entidades como Banco Bilbao Vizcaya Argentaria, Banco Santander Central Hispano (espa&ntilde;oles) o Intesa-SanPaolo (italiano) alcanzaron para un respiro.<br />
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Hasta d&iacute;as atr&aacute;s, esos bancos parec&iacute;an arrastrados por problemas en sus pa&iacute;ses. Entre ellos, trabas para gestionar cr&eacute;ditos de corto plazo a tasas razonables- &ldquo;Por ende, estos resultados, pese a su escasa diafanidad, distinguen entre instituciones m&aacute;s o menos s&oacute;lidas y las m&aacute;s endebles&rdquo;, se&ntilde;ala un informe de Cr&eacute;dit Suisse, Z&uuml;rich. <br />
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La fortaleza de los bancos privados de Uni&oacute;n Europea o su capacidad de absorber p&eacute;rdidas potenciales (en casos de ceses de pagos soberanos) siguen en el candelero. En pocos d&iacute;as, ser&aacute;n temas de una &ldquo;supercumbre&rdquo; que no se limitar&aacute; a la reestructuraci&oacute;n de la deuda griega ni la portuguesa. <br />
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Por de pronto, la canciller germana Angela Merkel anunci&oacute; el domingo que asistir&aacute; el martes a ese encuentro en Bruselas &ldquo;s&oacute;lo si surge un acuerdo para resolver la cuesti&oacute;n helena. Con participaci&oacute;n de acreedores privados, se entiende&rdquo;. A su criterio &ldquo;cuanto mayor sea la contribuci&oacute;n voluntaria de ese sector, menos falta har&aacute;n ulteriores pasos&rdquo;,<br />
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Atrapada en su ortodoxia, Merkel rechaza una formal reestructuraci&oacute;n de la deuda griega. En lo tocante a las pruebas de resistencia, Berl&iacute;n no les da mucha relevancia, pues la lista de 91 bancos est&aacute; dominada por peque&ntilde;os prestamistas.</p>
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