Un grupo de legisladores norteamericanos presentaron un proyecto de ley para prohibir el uso del reconocimiento facial por parte de los agentes del orden. También exigiría que que las policías estaduales y locales impongan prohibiciones similares para poder recibir financiamiento federal.
El proyecto de ley llega en un momento en que se está estudiando con preocupación el uso policial de la tecnología de reconocimiento facial luego de las protestas generadas por el asesinato de George Floyd a fines de mayo. Los estudios muestran una y otra vez que la tecnología es menos precisa cuando se trata de personas negras. El New York Times acaba de informar que por un algoritmo equivocado la policía de Michigan detuvo a un hombre: Robert Julian-Borchak Williams. Falló el software de reconocimiento facial. Pero el fallo afectó a un negro, no a un blanco.
El debate se calienta cada día más en Estados Unidos sobre el racismo en la aplicación de la ley. “¿Ustedes creen que todos los negros somos iguales?” preguntó Williams cuando lo interrogaban mostrándole la foto de un hombre que robaba relojes en una joyería.
El movimiento que reclama restringir el uso de la tecnología de reconocimiento facial surge en parte de la presión de las mismas compañías tecnológicas que por fin reaccionan al lobby que los activistas vienen haciendo desde hace años. Ahora las pelota está en el campo de los legisladores que deberán conseguir el apoyo necesario para aprobar el proyecto..