Detrás de estos objetivos se encuentran la comunidad en general y las personas en situación de vulnerabilidad social, adolescentes, adultos, poblaciones rurales, y personas con discapacidad. Y en un tercero: personas mayores, mujeres, pueblos originarios, y migrantes, entre otros.
Luego de los aportes prioritarios a la educación, tanto del 70% de las empresas que participan en ISPL cuanto del 52% de las fundaciones, en estas últimas las temáticas siguientes a apoyar son cultura; reducción de la pobreza e inclusión; fortalecimiento de la sociedad civil; y salud. En cambio para las empresas vienen, en ese orden, reducción de la pobreza e inclusión; medio ambiente; salud; y fortalecimiento de la sociedad civil.
La diferencia guarda relación con las políticas de responsabilidad social empresaria, en las que el medio ambiente ocupa un lugar de preponderancia.
Otros temas presentes en la agenda de la inversión social privada local son: derechos humanos; ciencia y tecnología; economía; y responsabilidad social empresaria. Y en menor medida: reforma del sector público y gobernabilidad; justicia y seguridad; y transparencia y lucha contra la corrupción.
La agenda de la cooperación internacional, en cambio, tiene entre sus temas prioritarios: reducción de la pobreza e inclusión; derechos humanos; medio ambiente; economía; reforma del sector público y gobernabilidad; y educación.
La principal fuente de financiamiento de las fundaciones (73%) es la compañía de origen; siguen fondos derivados de actividades propias (22%), y el resto recibe fondos de legados, fundaciones internacionales y familias. Más de la mitad de las fundaciones y todas las empresas dijeron pertenecer a entidades de segundo grado. Entre las más mencionadas, figura el GDFE.
Las entidades donantes intervienen en la comunidad, en mayor medida, mediante el desarrollo de proyectos. También lo hacen para casos puntuales y con apoyos para el fortalecimiento institucional.
Un alto porcentaje de fundaciones (80%) y empresas (97%) implementan sus proyectos de IS en alianza con otras entidades. El principal aliado, en ambos casos, son las OSCs. Otros actores destacados son: las entidades públicas, y otras fundaciones, y empresas. Y en menor medida, los organismos internacionales.
La comunidad integra, activamente, las distintas fases del ciclo del proyecto (diseño, implementación y evaluación). El 77% de las fundaciones, respondió que cuenta con su participación; y el 81%, de las empresas.
Casi la mitad de las fundaciones (48%) y la mayoría de las empresas (78%) lleva más de 20 años desarrollando acciones de inversión social, que se focaliza en la provincia de Buenos Aires (46%, si se mira a las empresas y 36 %, a las fundaciones) y los siguientes lugares los ocupan: Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Córdoba, Mendoza y Santa Fe (en distinto orden según se trate de compañías o fundaciones).
En el otro extremo, las provincias que registran menor inversión social, son: Tierra del Fuego; Formosa; y La Rioja. Por otro lado, se destaca entre las fundaciones, el alcance nacional (36%); no así en las compañías, donde solo un 14% abarca con sus acciones a todo el país.
La cooperación Internacional, en tanto, está focalizada en cuestiones más de tipo sistémico y estructural, con miras en el mediano y el largo plazo; los inversores sociales privados buscan, en tanto, intervenciones más directas, muchas veces ante problemas emergentes y con impactos medibles en el corto/mediano plazo.
En la ISPL lideran el ranking, las donaciones en especie (que agrupan productos y servicios gratuitos, y también el voluntariado). Luego: fondos, becas y fellowships, y premios. Mientras que en la cooperación internacional, el principal tipo de aporte son los fondos; detrás: becas y fellowships y premios; y no se registran donaciones en especie.
Asimismo, se destaca la presencia de voluntarios (representa el 60% de los RRHH en las empresas, y el 33%, en las fundaciones). Los equipos se completan con: personal full time, parttime, consultores externos, y pasantes.
El 46% de las fundaciones y el 37% de las empresas produce informes sobre su inversión social realizada. Y más del 90% de las fundaciones y todas las empresas evalúan sus acciones de IS. Las más frecuentes son: de resultados, monitoreos, y diagnóstica. Sin embargo, cerca del 50% también lleva a cabo, las de impacto.
Para ampliar sobre estos datos y conocer más resultados de la investigación ingresar a la Sección “Serie Estudios de Inversión Social Privada”: http://www.gdfe.org.ar/es/fr_bib_isp.html. Allí también se encuentran disponibles todas las investigaciones impulsadas por el GDFE.