Rusia ataca otra vez la venta de granos en Ucrania

spot_img

Hay temor por la seguridad alimentaria mundial ante la presión de Moscú por una mayor cuota en el mercado del trigo. El colapso del acuerdo de granos del Mar Negro y los ataques de Rusia a la infraestructura de Ucrania han alterado los suministros.

Y renovado el peligro de desabastecimiento mundial de granos. Rusia y Ucrania han atentado mutuamente contra sus respectivas infraestructuras de exportación de commodities desde que en julio el Kremlin se apartó de un acuerdo negociado por la ONU que permitía que las exportaciones de granos ucranianos salieran por el Mar Negro.

El origen de la iniciativa de granos del Mar Negro

Ucrania es conocida como “el granero de Europa”, ya que suministra cerca del 10% de las exportaciones mundiales de trigo y casi la mitad del aceite de girasol del mundo. Casi el 90% de las exportaciones ucranianas de cereales salen de los puertos del Mar Negro.

La invasión rusa de febrero de 2022 cortó efectivamente esa ruta. Las flotas rusas bloquearon el Mar Negro; muchas partes estaban fuertemente minadas. Ucrania transportaba algo de grano hacia el oeste, a través de Europa, pero la infraestructura inadecuada y la guerra hicieron que estas rutas fueran costosas y lentas, un sustituto insuficiente para el comercio marítimo. En la primavera de 2022, millones de toneladas de grano estaban atascadas en los silos de los puertos ucranianos.

La invasión rusa no fue lo único que ejerció presión sobre el suministro mundial de alimentos. Años de sequía en muchos lugares y las interrupciones de suministro provocadas por la pandamia de Covid-19 añadieron tensión al mercado. Pero la guerra de Ucrania se sumó y los precios mundiales de los alimentos se dispararon. Otros países se asustaron y empezaron a frenar sus propias exportaciones de alimentos y fertilizantes por temor a la escasez interna, lo que hizo subir los precios. Esto dificultó aún más el acceso a los alimentos para los países más pobres, muchos de los cuales dependen de las importaciones agrícolas. Esta situación amenazó con agravar la crisis mundial del hambre.

La Iniciativa para el Transporte Seguro de Granos y Alimentos desde los puertos ucranianos, también llamada Iniciativa de Granos del Mar Negro y comúnmente denominada el acuerdo de granos, fue un acuerdo entre Rusia, Ucrania, Turquía y las Naciones Unidas (ONU) durante la invasión rusa de Ucrania que evitó lo peor de esa catástrofe.

El colapso del Acuerdo

Pero en el transcurso de mes de julio Rusia provocó el colapso del acuerdo bloquieando la exportación de granos ucranianos. Las fuerzas rusas atacaron con misiles las terminales de granos en Ucrania y amenazaron con atacar todos los barcos que circulen por el Mar Negro. Por su parte, Kyiv atacó con drones barcos y petroleros rusos.

Esta escalada aumenta los riesgos y genera incertidumbre. Bloquear la capacidad de Ucrania para exportar trigo, cebada, maíz y otros granos abre una oportunidad para que Moscú se alce con una cuota mayor del mercado mundial de granos, dicen los analistas. La guerra subió los precios, aparentemente para el largo plazo,  permitiendo al Kremlin compensar las pérdidas sufridas por las sanciones económicas de Occidente.

Rusia, que es el mayor país exportador de trigo del mundo,  tuvo en 2022-2023 una cosecha récord, que generó 23% más volumen que el promedio de los cinco años anteriores. Eso significa que Moscú tiene unos 60 millones de toneladas para exportar trigo este año y el próximo, mucho más de lo usual, según cifras de S&P Global Commodities Insights.

Pocos días después de la caída del acuerdo, el presidente Vladimir Putin dijo que Rusia entregará granos gratis a algunas naciones africanas, una región que dependía de los granos ucranianos.

El colapso del acuerdo de granos se produce en momentos de crisis del sistema global de alimentos. Mientras los grandes importadores de trigo ucraniano incluyen a China y España, los más afectados serán los países en desarrollo de África y Oriente Medio.

Ucrania acaba de anunciar que intentará romper unilateralmente el bloqueo naval impuesto a sus puertos y comenzar a exportar granos, pero admitió que sus barcos mercantes, que recorrerán lo que llama los “corredores temporales”, serán un blanco militar para Rusia.  Esas rutas alternativas de transporte también serán objeto de ataques.

Compartir:

spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img

Noticias

CONTENIDO RELACIONADO