Volkswagen: un consorcio ítaloespañol en pos de Seat
La división ibérica del grupo con sede en Wolfsburg viene perdiendo plata desde hace tiempo. Pero la mayor automotriz europea siempre ha desmentido rumores sobre su venta.
Ahora aparece una sociedad entre dos familias empresarias, Carulla y Fossati, pero Vokskwagen se niega a hacer comentarios. No obstante, hace pocos días, en medio de un llamativo silencio en los medios, Holger Härter se mostraba disconforme con los resultados de las reetructuración.
De por sí, eso llama la atención, pues Härter no pertenece a VW, sino que es número dos en Porsche. Como se sabe, esta firma –manejada por Ferdinand Piëch, vástago de la familia fundadora- tiene 31% de VW y aspira a elevar esa participación a 51%. Pero controla férreamente la gestión.
La insatisfacción de Härter se centra en Seat, cuya situación definió como “problemática”. Para empezar, no parece fácil que sus ingresos lleguen a representar 10% del capital invertido. Varios analistas alemanes ven en esa señal un preludio a negociaciones donde estará en juego el control de la marca hispánica
Por su parte, en Madrid todos miran hacia Star, un conglomerado alimentario (¿?) creado por los clanes Carulla, Fosatti y el grupo Bergé. Esta firma es la mayor importadora de automóviles en España. A cargo de los contactos está –dicen los mentideros milaneses- Giuseppe Tartaglione, director general de Volkswagen Italia, antes vicepresidente de Seat para marketing. En otros tiempos, asesoraba a Magneti Marelli y a la división tecnológica de Fiat.
En Alemania se estiman factibles las tratativas, pero no se descartan otros interesados, entre ellos hindúes (o parsíes) y chinos. En el pasado, hubo frustrados contactos con surcoreanos (Kia) y hasta con Alfa Romeo (Fiat). El “golpe de estado” de Porsche en VW explica que, ahora, se baraje ceder Seat y que un hombre de Piëch, Martin Winterkorn (director ejecutivo de VW) esté de acuerdo.
Seat pasó a VW en 1986, tras retirarse Fiat. En 2006 ha perdido alrededor de € 50 millones. Todavía debe eliminar 14.000 puestos laborales de ahora a 2009, como parte de un tipo de “restructuración” muy habitual en este negocio.
Ahora aparece una sociedad entre dos familias empresarias, Carulla y Fossati, pero Vokskwagen se niega a hacer comentarios. No obstante, hace pocos días, en medio de un llamativo silencio en los medios, Holger Härter se mostraba disconforme con los resultados de las reetructuración.
De por sí, eso llama la atención, pues Härter no pertenece a VW, sino que es número dos en Porsche. Como se sabe, esta firma –manejada por Ferdinand Piëch, vástago de la familia fundadora- tiene 31% de VW y aspira a elevar esa participación a 51%. Pero controla férreamente la gestión.
La insatisfacción de Härter se centra en Seat, cuya situación definió como “problemática”. Para empezar, no parece fácil que sus ingresos lleguen a representar 10% del capital invertido. Varios analistas alemanes ven en esa señal un preludio a negociaciones donde estará en juego el control de la marca hispánica
Por su parte, en Madrid todos miran hacia Star, un conglomerado alimentario (¿?) creado por los clanes Carulla, Fosatti y el grupo Bergé. Esta firma es la mayor importadora de automóviles en España. A cargo de los contactos está –dicen los mentideros milaneses- Giuseppe Tartaglione, director general de Volkswagen Italia, antes vicepresidente de Seat para marketing. En otros tiempos, asesoraba a Magneti Marelli y a la división tecnológica de Fiat.
En Alemania se estiman factibles las tratativas, pero no se descartan otros interesados, entre ellos hindúes (o parsíes) y chinos. En el pasado, hubo frustrados contactos con surcoreanos (Kia) y hasta con Alfa Romeo (Fiat). El “golpe de estado” de Porsche en VW explica que, ahora, se baraje ceder Seat y que un hombre de Piëch, Martin Winterkorn (director ejecutivo de VW) esté de acuerdo.
Seat pasó a VW en 1986, tras retirarse Fiat. En 2006 ha perdido alrededor de € 50 millones. Todavía debe eliminar 14.000 puestos laborales de ahora a 2009, como parte de un tipo de “restructuración” muy habitual en este negocio.
