La lista del gobierno incluye cierre de bases militares, reducción del programa de armas nucleares
y una reestructuración del programa de seguro médico militar que cuesta más de lo que el país gasta en toda su diplomacia y ayuda externa. También en consideración se encuentra la reducción del plan de aviones de guerra de próxima generación.
Ninguno de esos programas va a desaparecer. Pero en el Pentágono se teme que el gobierno va a reducir más de lo previsto para destinar el dinero a otras áreas donde cree que el dinero es más necesario. Esas áreas parecerían ser el desarrollo de ciberarmas.
En forma pública obama no ha respaldado los recortes, aunque condenó el método de recortar en forma equitativa todos los programas militares. Cuando mañana visite Capital hill intentará persuadir a los legisladores que logran un acuerdo de reducción del déficit a largo plazo y reemplacen los cortes indiscriminados con otros más dirigidos.
Cuando Obama se hizo cargo de la presidencia cuatro años atrás, el país peleaba guerras en Irak y Afganistán y los recortes profundos en defensa eran impensables. aun así, obligó al Pengágono a recortar casi US$ 50.000 millones al año. hoy se podría pensar en recortar US$ 100.000 al año si lograran acuerdo en qué programas recortar antes.