Nuevas presiones del Fondo Monetario

El FMI reclama ahora más superávit primario, aunque sea algo cauto respecto de la economía real. Sus técnicos estiman que el PBI argentino crecerá sólo 5,5 % este año, pero “si tienen sustento las políticas que se lleven adelante”.

Fiel a las rígidas recetas de los 90, recientemente criticadas por Joseph Stiglitz (Nobel económico compartido en 2001), el Fondo Monetario insiste en una política astringente. Cualquier superávit más allá de lo razonable –solía decir otro Nobel ,Franco Modigliani- puede ser contraproducente.

Cabe consignar, empero, que no se trata de una declaración específica del organismo –como dan a entender algunos medios-, sino de un pasaje del informe general sobre perspectivas económicas mundiales. Redactado hace semanas, se destina a la inminente asamblea semestral conjunta FMI-Banco Mundial.

Entre las medidas “prioritarias” que desean imponer en Argentina, los funcionarios del Fondo subrayan “aumentar el superávit primario, reestructurar la deuda externa para restaurar la sustentabilidad fiscal, fortalecer el sistema bancario y mejorar las condiciones para los negocios privados”.

Por su parte, el secretario de Hacienda, Carlos Mosse, replicó: “el superávit anual superará la meta ya convenida con el Fondo. Es lógico –advirtió- que haya modificaciones en el gasto contemplado en el Presupuesto 2004. Por ejemplo, en seguridad. Pero la oferta de renegociación de deuda pública no contempla ningún pago en esta etapa”. Es decir, durante 2004.

No obstante, Mosse sostuvo que “de ninguna manera el superávit anual superará los $ 15.000 millones”.

Fiel a las rígidas recetas de los 90, recientemente criticadas por Joseph Stiglitz (Nobel económico compartido en 2001), el Fondo Monetario insiste en una política astringente. Cualquier superávit más allá de lo razonable –solía decir otro Nobel ,Franco Modigliani- puede ser contraproducente.

Cabe consignar, empero, que no se trata de una declaración específica del organismo –como dan a entender algunos medios-, sino de un pasaje del informe general sobre perspectivas económicas mundiales. Redactado hace semanas, se destina a la inminente asamblea semestral conjunta FMI-Banco Mundial.

Entre las medidas “prioritarias” que desean imponer en Argentina, los funcionarios del Fondo subrayan “aumentar el superávit primario, reestructurar la deuda externa para restaurar la sustentabilidad fiscal, fortalecer el sistema bancario y mejorar las condiciones para los negocios privados”.

Por su parte, el secretario de Hacienda, Carlos Mosse, replicó: “el superávit anual superará la meta ya convenida con el Fondo. Es lógico –advirtió- que haya modificaciones en el gasto contemplado en el Presupuesto 2004. Por ejemplo, en seguridad. Pero la oferta de renegociación de deuda pública no contempla ningún pago en esta etapa”. Es decir, durante 2004.

No obstante, Mosse sostuvo que “de ninguna manera el superávit anual superará los $ 15.000 millones”.

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