Las expectativas para el consumo de todo 2013 son positivas aunque controladas, en un año en que se la administración y el control de precios fueron el rasgo distintivo del primer semestre y aparece un perfil festivo en el segundo, signado por el proceso electoral que se inició a mediados de año y se prolonga hasta los primeros días de noviembre.
La conclusión que extrae de ese comportamiento global es que se generó un fuerte campo competitivo, se consolidó el concepto de cercanía, tanto en los tickets como en la apertura de nuevos locales, y cada canal tuvo oportunidad de penetrar en variados segmentos.
Principalmente, el crecimiento en las ventas se hizo notar más en el interior y prevalecieron las ofertas de precios y las promociones, donde las nuevas tecnologías como el e-commerce se destacaron.
Proyectada la evolución del mercado por CCR para 2013, el indicador de venta de food empaquetado, alimentos, bebidas, cosmética y tocador y limpieza en los canales muestra un 2,5% de aumento entre enero y diciembre, algo mejor que el 2,1% de 2012. Tomando la década, acumularía 69%, pero a partir de una baja del 25% que hubo en 2002.
La percepción general es que la situación económica actual del país es algo o mucho peor que en 2012 para el 69% de los encuestados, que manifestaron preocupación por la inflación y el aumento de precios.
La incidencia del consumo en el PIB pasa del 66 al 72%, si bien el indicador general de la economía retrocede desde el tercer trimestre de 2011. La inversión bruta fija cae proporcionalmente 22,5% con relación a 2011, donde 60% corresponde a construcción y 25% a bienes de capital.
Paralelamente en el primer trimestre de 2013 se expande 28% (lo venía haciendo al 30%) el gasto público respecto de igual período de 2012, en el contexto de un PIB que baja 1,4%. En tanto los ingresos públicos mejoran 26,7%, lo cual origina que el superávit se reduzca 32,8% en comparación con el arranque de 2012.
Comportamiento
Entre enero y julio de este año, los canales de comercialización vendieron 2,5% más que en el mismo período del año pasado. El repunte se dio a partir de abril y se consolidó en mayo, por efecto del cierre de paritarias, el ajuste en las asignaciones universales por hijo, la mejora automotriz y por el incremento de la actividad agrícola, según consignó la consultora CCR al analizar el consumo tomando como base 124 categorías de productos.
Los hiper, super y mercados de descuento lideraron la mejora, revirtiendo la tendencia que había favorecido a los canales tradicionales durante todo el año pasado y 2011. Su evolución fue de 3,1% en los siete meses, contra 2,1% que subieron los tradicionales.
El período de despegue de las grandes cadenas coincide con el congelamiento de precios que dispusiera el gobierno para 500 productos, y su efecto se reflejó en el indicador general de ventas, sobre todo hasta junio. En julio, se registró una desaceleración en las ventas
El informe da cuenta que en los tickets de las cadenas nacionales se destacaron en los siete meses las golosinas (6,5%), bebidas sin alcohol (6,6%) y heladeras (4,3%), mientras que los artículos del hogar (-0,1%) y los freezer (-0,2%) resultaron con mayor variación negativa.
Los precios promedio en las cadenas nacionales subieron 10% en mayo con las paritarias, aunque comparando julio con abril el alza fue del 9,7%.
En los canales híper, súper y discount se divide claramente la consecuencia que el año pasado tuvieron en los volúmenes comercializados el poder adquisitivo reforzado por las paritarias, aguinaldos y actividad económica (agrícola y automotriz), que recién en agosto mostraron su mejor cara, con relación a éste, en el que por comparación con aquellas bajas tasas los porcentajes resultaron más elevados. Inclusive, en mayo, durante el congelamiento de precios dispuesto por el gobierno, la venta creció 8%. En el acumulado en siete meses, fue del 2.9%.
La distribución por canales tomada en un año indica que en 2012 la participación de los supermercados y discount cercanos a los grandes conglomerados urbanos, junto con los autoservicios chinos, facturaron 7,6 y 8,8% más que el año anterior, mientras que los hipermercados bajaron levemente, lo mismo que los almacenes y polirrubros. La facturación total de 2012 alcanzó los 172.980 millones de pesos, contra 136.527 millones, lo que representa un incremento en bruto del 26,7%.
Cercanía
La tendencia de las grandes cadenas a abrir locales de cercanía, que comenzó en 2011, se consolidó el año pasado, cuando Carrefour se hizo cargo de las ex Eki y rotuló 172 locales, que en 2013 se ampliaron a 37 más. La competencia con Día % hizo que el total de bocas de cercanía aumentaran 71% este año, sumando 629. Hace dos años, había 229.
El fenómeno redundó en un liderazgo tanto en volúmenes como en valores vendidos de los mercados de cercanía, del 15,3 y 42,6% respectivamente. Los supermercados subieron un tercio menos en unidades y algo más de la mitad en pesos, mientras los hipermercados expendieron 7,7% menos en el mismo lapso.
Las grandes cadenas colocaron mejor las marcas propias en el Gran Buenos Aires en junio y julio de 2013 (con alzas en la facturación de más del 9% mensual) que a nivel nacional o en el interior.
En cuanto al comportamiento de los precios de 10.000 productos en el período de congelamiento, a nivel mayorista despegaron en mayo con mayor fuerza que en los híper, súper y discounts. En los 500 productos, el alza fue mayor, aunque tendió a decrecer en julio, al diluirse el efecto del pago de paritarias, aguinaldo, promociones, etc. Sí fue evidente que el ritmo de ajuste de los precios cedió en julio respecto a junio que en junio con relación a mayo.
La comunicación de las cadenas vía internet reflejó entre enero y agosto la consecuencia del cepo publicitario dispuesto a partir de marzo por la Secretaría de Comercio Interior, y así en la industria del retail subió 13,3%, en higiene y belleza 10,1% y automotriz, 8%.