India decidió equipos de Huawei y otras empresas chinas de sus redes de telecomunicaciones. Lo hace en parte como respuesta a una escalada en las disputa fronteriza que mantiene con su vecina. Los dos países no logran resolver un conflicto fronterizo y los medios indios informan de repetidas incursiones chinas en territorio Indio. Además, India tiene un fuerte desequilibrio comercial con China.
El desplazamiento de Huawei es otro golpe duro a la compañía tecnológica en uno de sus mercados más fuertes. Nueva Delhi no ha emitido una prohibición formal escrita para los proveedores chinos de equipamiento – como Huawei y ZTE – y tampoco el gobierno del primer ministro Narendra Modi ha hecho un pronunciamiento público.
No obstante, varios funcionarios de gobierno y ejecutivos de la industria dicen que hay claras señales de los ministerios para que que los proveedores locales de servicios de telecomunicaciones eviten usar equipos chinos en sus inversiones futuras, incluidas las redes 5G.
