De la Rúa:” el futuro será brillante”

Anticipó que la Argentina "está en el momento de romper" con el estancamiento económico ."España es un espejo de nuestro futuro", explicó el mandatario en la Cámara de Comercio de Madrid ante 300 empresarios.

26 octubre, 2000

En España, el Presidente dijo que el país “está en el momento de romper con dos años de recesión”, impulsando a los hombres de negocios a buscar, y encontrar, lo que Machinea denominó “las inversiones que necesitamos para crecer”.

El incentivo rindió sus frutos ya que se firmaron tres convenios bilaterales para facilitar inversiones en áreas estratégicas: turismo, comunicaciones y pequeña y mediana empresa.

Pero de la Rúa continuó enviando mensajes de confianza hacia la Argentina; “España es un espejo de nuestro futuro próximo. Nos vemos reflejados en sus procesos de transición política y económica y en los resultados que ha cosechado”—aseguró—.

Con el Presidente sentado a su lado, ante un auditorio de empresarios españoles y argentinos que lo escuchó con atención, el ministro Machinea enumeró las razones que a su juicio valen para “recuperar la confianza y mejorar la rentabilidad inversora”.

Puso énfasis en el esfuerzo fiscal y en la señal que implica negociar el endeudamiento externo “con plazos de contratación superiores a los de cualquier país emergente”.

Para el ministro, ese nuevo escenario y el aliento del aumento del 14% en las exportaciones “consolidan una base sólida para esperar a partir de ahora un crecimiento menos volátil que el experimentado por el país en la segunda mitad de los noventa”.

El primer mandatario argentino, continuó augurando un futuro ” brillante” para la Argentina y le dedicó un elogio a los empresarios: “También queremos seguir el ejemplo de ustedes, que aprendieron a moverse y perseverar a lo largo de las dificultades que tuvo el país”.

En España, el Presidente dijo que el país “está en el momento de romper con dos años de recesión”, impulsando a los hombres de negocios a buscar, y encontrar, lo que Machinea denominó “las inversiones que necesitamos para crecer”.

El incentivo rindió sus frutos ya que se firmaron tres convenios bilaterales para facilitar inversiones en áreas estratégicas: turismo, comunicaciones y pequeña y mediana empresa.

Pero de la Rúa continuó enviando mensajes de confianza hacia la Argentina; “España es un espejo de nuestro futuro próximo. Nos vemos reflejados en sus procesos de transición política y económica y en los resultados que ha cosechado”—aseguró—.

Con el Presidente sentado a su lado, ante un auditorio de empresarios españoles y argentinos que lo escuchó con atención, el ministro Machinea enumeró las razones que a su juicio valen para “recuperar la confianza y mejorar la rentabilidad inversora”.

Puso énfasis en el esfuerzo fiscal y en la señal que implica negociar el endeudamiento externo “con plazos de contratación superiores a los de cualquier país emergente”.

Para el ministro, ese nuevo escenario y el aliento del aumento del 14% en las exportaciones “consolidan una base sólida para esperar a partir de ahora un crecimiento menos volátil que el experimentado por el país en la segunda mitad de los noventa”.

El primer mandatario argentino, continuó augurando un futuro ” brillante” para la Argentina y le dedicó un elogio a los empresarios: “También queremos seguir el ejemplo de ustedes, que aprendieron a moverse y perseverar a lo largo de las dificultades que tuvo el país”.

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