China: nombran un experto en Latinoamérica y un no comunista

El flamante canciller, Yang Jiachi, es experto en este hemisferio. Otro nuevo, Wan Gang, llega a ciencia y tecnología como dirigente extrapartidario. Pero ambos cambios no implican la apertura democrática que tantos analistas imaginan.

30 abril, 2007

Sin duda, las dos decisiones sorprendieron a Occidente, especialmente porque fueron anunciadas al clausurarse las sesiones el parlamento e iniciarse las vacaciones posteriores al 1º de mayo. Para cumplir las formalidades, el canciller anterior (Li Zhaoxing) optó por jubilarse porque cumple 67 años. Pero Wu Yi, viceprimera ministra, tiene 69 y sigue lo más campante.

Yang nació en Shanghai y, hasta ahora, era viceministro de asuntos latinoamericanos. Resulta llamativo que, mientras Estados Unidos sigue sin tener prioridades geopolíticas claras al sur del río Bravo –salvo las obsesiones de George W.Bush con Hugo Chávez-, China ascienda a canciller un hombre ducho en el tema que, entre otras cosas, habla castellano. Por otra parte, Yang fue embajador en Washington (1983/7, 1993/5).

Precisamente, la designación coincide con tres hechos que afectan intereses en el exterior. Primero, el atentado a instalaciones petroleras chinas en Etiopìa, por parte de guerrillas somalíes o eritreas, que costó 75 muertos, entre ellos nueve chinos. Poco después, la minúscula isla caribeña de Santa Lucía rompió lazos con Beijing y los entabló con Taipei, un gesto tan anacrónico como sospechoso de corruptelas. Finalmente, las tensiones con Taiwán crecieron porque esta provincia separada rechaza el paso de una antorcha olímpica –un hecho adjetivo- por su territorio rumbo a Beijing.

En cuanto a Gang, es el primer ministro no comunista desde 1949. Este ex rector universitario pertenece realmente a uno de ocho sellos aliados habituales, para el caso el partido del Interés público. Sólo que esta agrupación tiene un respetable pasado, pues se fundó en 1925(antes que el Partido comunista mismo).

Sin duda, las dos decisiones sorprendieron a Occidente, especialmente porque fueron anunciadas al clausurarse las sesiones el parlamento e iniciarse las vacaciones posteriores al 1º de mayo. Para cumplir las formalidades, el canciller anterior (Li Zhaoxing) optó por jubilarse porque cumple 67 años. Pero Wu Yi, viceprimera ministra, tiene 69 y sigue lo más campante.

Yang nació en Shanghai y, hasta ahora, era viceministro de asuntos latinoamericanos. Resulta llamativo que, mientras Estados Unidos sigue sin tener prioridades geopolíticas claras al sur del río Bravo –salvo las obsesiones de George W.Bush con Hugo Chávez-, China ascienda a canciller un hombre ducho en el tema que, entre otras cosas, habla castellano. Por otra parte, Yang fue embajador en Washington (1983/7, 1993/5).

Precisamente, la designación coincide con tres hechos que afectan intereses en el exterior. Primero, el atentado a instalaciones petroleras chinas en Etiopìa, por parte de guerrillas somalíes o eritreas, que costó 75 muertos, entre ellos nueve chinos. Poco después, la minúscula isla caribeña de Santa Lucía rompió lazos con Beijing y los entabló con Taipei, un gesto tan anacrónico como sospechoso de corruptelas. Finalmente, las tensiones con Taiwán crecieron porque esta provincia separada rechaza el paso de una antorcha olímpica –un hecho adjetivo- por su territorio rumbo a Beijing.

En cuanto a Gang, es el primer ministro no comunista desde 1949. Este ex rector universitario pertenece realmente a uno de ocho sellos aliados habituales, para el caso el partido del Interés público. Sólo que esta agrupación tiene un respetable pasado, pues se fundó en 1925(antes que el Partido comunista mismo).

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