Los riesgos y el plazo para una fusión exitosa le parecieron demasiado grandes a los acreedores, señaló el comité que timonea la convocatoria. Esta postura es clave, pues de ella dependen los futuros términos de cualquier plan eventualente orientado a emerger de la bancarrota.
El rechazo es un golpe para Douglas Parker, presidente ejecutivo de US Airways, y su proyecto de forma la mayor aerolínea comercial del mundo. Pero también demora algo esencial a la sobrevivencia del negocio, o sea el proceso de fusiones y adquisiciones (mal llamado “consolidaciòn”).
“La actitud poco sabia de los acredores trabará la eventual consideración de F&A entre otras compañías”, teme la consultoría especializada LECG (Washington). Por cierto, la mera posibilidad de una alianza US Airways-Delta ya promovía contactos dentro del sector.
Los riesgos y el plazo para una fusión exitosa le parecieron demasiado grandes a los acreedores, señaló el comité que timonea la convocatoria. Esta postura es clave, pues de ella dependen los futuros términos de cualquier plan eventualente orientado a emerger de la bancarrota.
El rechazo es un golpe para Douglas Parker, presidente ejecutivo de US Airways, y su proyecto de forma la mayor aerolínea comercial del mundo. Pero también demora algo esencial a la sobrevivencia del negocio, o sea el proceso de fusiones y adquisiciones (mal llamado “consolidaciòn”).
“La actitud poco sabia de los acredores trabará la eventual consideración de F&A entre otras compañías”, teme la consultoría especializada LECG (Washington). Por cierto, la mera posibilidad de una alianza US Airways-Delta ya promovía contactos dentro del sector.