En un momento dado, el retroceso bursátil rozaba 7%. Los 2.280.000 abonados perdidos en 2006 la ponen a la altura de otras telcos en problemas. No sorprendió, pues, que este mismo lunes Telecom Italia cediese 1,52% en Milán, British Telecom 1% en Londres, KPN 1,2% en Amsterdam o SwissCom lo mismo en Zürich. El DowJones Stoxx, panel que abarca telcos europeas, descendió 1,1%.
Poco antes. Se confirmaba que las previsiones de creciente este año bajaban de € 20.000 a 19.000 millones en lo tocante a márgenes operativos. Importar acotar que un segmento tan relevante como banda ancha aportará en 2007 ganancias netas inferiores en € 800 millones a las proyectadas.
El anuncio de DT significa que el sector telcos en la Unión Europea –no ya sólo en la Eurozona- no se forja ilusiones. Hasta hace poco, éstas explicaban que (en el segundo semestre) el índice específico de la serie DJ Stoxx hubiese avanzado 26%, mientras los analistas daban por superada la crisis que había empezado en 2004. Los números de DT y sus efectos bursátiles señalan lo contrario.
En un momento dado, el retroceso bursátil rozaba 7%. Los 2.280.000 abonados perdidos en 2006 la ponen a la altura de otras telcos en problemas. No sorprendió, pues, que este mismo lunes Telecom Italia cediese 1,52% en Milán, British Telecom 1% en Londres, KPN 1,2% en Amsterdam o SwissCom lo mismo en Zürich. El DowJones Stoxx, panel que abarca telcos europeas, descendió 1,1%.
Poco antes. Se confirmaba que las previsiones de creciente este año bajaban de € 20.000 a 19.000 millones en lo tocante a márgenes operativos. Importar acotar que un segmento tan relevante como banda ancha aportará en 2007 ganancias netas inferiores en € 800 millones a las proyectadas.
El anuncio de DT significa que el sector telcos en la Unión Europea –no ya sólo en la Eurozona- no se forja ilusiones. Hasta hace poco, éstas explicaban que (en el segundo semestre) el índice específico de la serie DJ Stoxx hubiese avanzado 26%, mientras los analistas daban por superada la crisis que había empezado en 2004. Los números de DT y sus efectos bursátiles señalan lo contrario.