(EFE).- Científicos españoles han diseñado un vehículo que no precisa conductor y cuyo control se basa en la llamada lógica borrosa, un nuevo código matemático-lingüístico, así como en el uso de un sensor GPS de comunicación por satélite.
El “coche inteligente” fue presentado en la capital española y sus creadores, Ricardo García Rosa y Teresa de Pedro, destacaron que el proyecto Autopía ha supuesto cuatro años de trabajo y unos 217.000 dólares, financiados a medias entre el gobierno regional de Madrid y la Comisión Nacional de Ciencia y Tecnología.
En la demostración a los medios de comunicación, el prototipo de vehículo, un Citroen Berlingo bautizado Babieca, que impulsado por un motor eléctrico puede alcanzar 90 kilómetros por hora de velocidad, se movió sin conductor y sin problemas por el circuito.
García Rosa detalló que el vehículo sin conductor, diseñado a partir de tecnología de control de robots móviles autónomos, es válido para estacionar, conducir en caravana y es de especial interés para personas minusválidas.
Destacó su utilidad para otras muchas aplicaciones, como la lucha contra incendios, vigilancia de desastres o visitas a parques temáticos.
Tras reconocer que en el mundo han sido diseñados muchos coches que se mueven solos con multitud de sensores, remarcó que su prototipo actualmente lleva sólo un sensor GPS (Global Position System) de comunicaciones por satélite, pero de “altísima precisión”, es decir con un margen de error de un centímetro.
Destacó que el “cerebro” del sistema, basado en las “reglas sencillas” de la lógica borrosa, ha sido desarrollado íntegramente por “científicos tecnológicos” del Instituto de Automática Industrial español y “no tiene nada que ver con los pilotos automáticos de los aviones”.
La lógica borrosa es una teoría matemático-lingüística impulsada en la década de los ’60 por Lofti Zadeh, quien asistió a la presentación del nuevo vehículo, que permite simular el comportamiento y la percepción de un conductor humano y no sólo atender datos puramente matemáticos.
García Rosa y Teresa de Pedro resaltaron las “muchísimas” aplicaciones que pueden derivarse de este novedoso sistema, que además de las ventajas para minusválidos, atascos o aparcamientos, serán importantes para bomberos o la detección y retirada de minas antipersonas.
Añadió que en estos momentos el coche puede funcionar y hacer un viaje de 500 kilómetros sin necesidad de acondicionar las carreteras con sensores específicos, aunque eso sí, sin tráfico de otros vehículos, ya que en esta primera fase el “coche inteligente” no es capaz de evitar obstáculos.
Los científicos se encuentran actualmente en conversaciones con diversas empresas automovilísticas para desarrollar el proyecto y de esta manera rentabilizar el invento.
(EFE).- Científicos españoles han diseñado un vehículo que no precisa conductor y cuyo control se basa en la llamada lógica borrosa, un nuevo código matemático-lingüístico, así como en el uso de un sensor GPS de comunicación por satélite.
El “coche inteligente” fue presentado en la capital española y sus creadores, Ricardo García Rosa y Teresa de Pedro, destacaron que el proyecto Autopía ha supuesto cuatro años de trabajo y unos 217.000 dólares, financiados a medias entre el gobierno regional de Madrid y la Comisión Nacional de Ciencia y Tecnología.
En la demostración a los medios de comunicación, el prototipo de vehículo, un Citroen Berlingo bautizado Babieca, que impulsado por un motor eléctrico puede alcanzar 90 kilómetros por hora de velocidad, se movió sin conductor y sin problemas por el circuito.
García Rosa detalló que el vehículo sin conductor, diseñado a partir de tecnología de control de robots móviles autónomos, es válido para estacionar, conducir en caravana y es de especial interés para personas minusválidas.
Destacó su utilidad para otras muchas aplicaciones, como la lucha contra incendios, vigilancia de desastres o visitas a parques temáticos.
Tras reconocer que en el mundo han sido diseñados muchos coches que se mueven solos con multitud de sensores, remarcó que su prototipo actualmente lleva sólo un sensor GPS (Global Position System) de comunicaciones por satélite, pero de “altísima precisión”, es decir con un margen de error de un centímetro.
Destacó que el “cerebro” del sistema, basado en las “reglas sencillas” de la lógica borrosa, ha sido desarrollado íntegramente por “científicos tecnológicos” del Instituto de Automática Industrial español y “no tiene nada que ver con los pilotos automáticos de los aviones”.
La lógica borrosa es una teoría matemático-lingüística impulsada en la década de los ’60 por Lofti Zadeh, quien asistió a la presentación del nuevo vehículo, que permite simular el comportamiento y la percepción de un conductor humano y no sólo atender datos puramente matemáticos.
García Rosa y Teresa de Pedro resaltaron las “muchísimas” aplicaciones que pueden derivarse de este novedoso sistema, que además de las ventajas para minusválidos, atascos o aparcamientos, serán importantes para bomberos o la detección y retirada de minas antipersonas.
Añadió que en estos momentos el coche puede funcionar y hacer un viaje de 500 kilómetros sin necesidad de acondicionar las carreteras con sensores específicos, aunque eso sí, sin tráfico de otros vehículos, ya que en esta primera fase el “coche inteligente” no es capaz de evitar obstáculos.
Los científicos se encuentran actualmente en conversaciones con diversas empresas automovilísticas para desarrollar el proyecto y de esta manera rentabilizar el invento.