(EFE).- La filial británica de Altavista informó hoy (martes 22) su renuncia al proyecto de ofrecer una tarifa plana de acceso a la red.
Más de 270.000 personas habían solicitado suscribirse al servicio, que tenía previsto comenzaren junio y que nunca llegó a concretarse.
Los usuarios iban a obtener acceso ilimitado a Internet, 24 horas al día, por 60 libras (US$ 90) anuales.
Altavista anunció hoy que se veía obligada a suspender el proyecto que anunció en junio y culpó al grupo British Telecom (BT), el mayor en el sector de la telefonía británica, del fracaso del servicio.
Según el gerente de Altavista en Gran Bretaña, Andy Mitchell, BT cobra por minuto a los proveedores de Internet por el uso de sus líneas, en vez de aplicar una tarifa fija.
El anuncio de Altavista representa un pequeño revés para el primer ministro británico, Tony Blair, que en junio saludó el proyecto del proveedor como el tipo de servicio necesario para crear una Internet para el pueblo.
Según Blair, la nueva economía británica, basada en la tecnología, no podrá despegar a menos que los precios de las llamadas se reduzcan para proporcionar un acceso a la red más económico.
Las encuestas informan que 45% de los usuarios de Internet tiene entre 15 y 24 años, y 48% son ejecutivos o profesionales.
Estas cifras fueron las que indujeron al primer ministro británico a lanzar un llamamiento, para acabar con la división digital de la sociedad y permitir que las clases menos privilegiadas accedan a la autopista informática
(EFE).- La filial británica de Altavista informó hoy (martes 22) su renuncia al proyecto de ofrecer una tarifa plana de acceso a la red.
Más de 270.000 personas habían solicitado suscribirse al servicio, que tenía previsto comenzaren junio y que nunca llegó a concretarse.
Los usuarios iban a obtener acceso ilimitado a Internet, 24 horas al día, por 60 libras (US$ 90) anuales.
Altavista anunció hoy que se veía obligada a suspender el proyecto que anunció en junio y culpó al grupo British Telecom (BT), el mayor en el sector de la telefonía británica, del fracaso del servicio.
Según el gerente de Altavista en Gran Bretaña, Andy Mitchell, BT cobra por minuto a los proveedores de Internet por el uso de sus líneas, en vez de aplicar una tarifa fija.
El anuncio de Altavista representa un pequeño revés para el primer ministro británico, Tony Blair, que en junio saludó el proyecto del proveedor como el tipo de servicio necesario para crear una Internet para el pueblo.
Según Blair, la nueva economía británica, basada en la tecnología, no podrá despegar a menos que los precios de las llamadas se reduzcan para proporcionar un acceso a la red más económico.
Las encuestas informan que 45% de los usuarios de Internet tiene entre 15 y 24 años, y 48% son ejecutivos o profesionales.
Estas cifras fueron las que indujeron al primer ministro británico a lanzar un llamamiento, para acabar con la división digital de la sociedad y permitir que las clases menos privilegiadas accedan a la autopista informática