miércoles, 1 de enero de 2025

Un chip que puede transferir datos mediante luz láser

spot_img

Se anuncia esta semana la creación de un chip de silicio que produce rayos láser. El descubrimiento permitirá reemplazar alambras con luz láser para enviar datos entre chips y eliminar el más importante cuello de botella en diseño de computadoras.

Por lo tanto, los fabricantes de chips estarán en condiciones de colocar al negocio de la comunicación de datos a alta velocidad en la misma curva de velocidad de procesamiento y costos decrecientes — fenómeno conocido como ley de Moore — que viene dándose en la industria de la computación durante las últimas cuatro décadas.
El desarrollo es resultado de una investigación conjunta entre Intel, el fabricante de chips más grande del mundo, y la Universidad de California, en Santa Bárbara. La comercialización de esta nueva tecnología podría tardar hasta finales de la década, pero la sola perspectiva de poder poner cientos de miles de rayos de luz cargados de datos sobre chips estándar seguramente va a conmocionar tanto las comunicaciones como la computación.

Los láser ya se usan para transmitir altos volúmenes de datos computarizados entre grandes distancias – por ejemplo, entre oficinas, ciudades y océanos – usando cables de fibra óptica. Pero en chips de computación, los datos se mueven a gran velocidad por los alambre interiores y luego la velocidad se reduce al paso de una tortuga cuando es enviada de chip a chip en el interior de una computadora. Eliminada la barrera, los diseñadores de computadoras podrán repensar sus nuevas máquinas, amontonando más chips tanto en los sistemas hogareños como en los gigantescos centros de datos.

Además, los chips de silicio-láser, compuestos por una especie de telaraña de luz láser además de alambres metálicos – auguran una infraestructura computacional nacional muchísimo más poderosa y menos cara.

Por lo tanto, los fabricantes de chips estarán en condiciones de colocar al negocio de la comunicación de datos a alta velocidad en la misma curva de velocidad de procesamiento y costos decrecientes — fenómeno conocido como ley de Moore — que viene dándose en la industria de la computación durante las últimas cuatro décadas.
El desarrollo es resultado de una investigación conjunta entre Intel, el fabricante de chips más grande del mundo, y la Universidad de California, en Santa Bárbara. La comercialización de esta nueva tecnología podría tardar hasta finales de la década, pero la sola perspectiva de poder poner cientos de miles de rayos de luz cargados de datos sobre chips estándar seguramente va a conmocionar tanto las comunicaciones como la computación.

Los láser ya se usan para transmitir altos volúmenes de datos computarizados entre grandes distancias – por ejemplo, entre oficinas, ciudades y océanos – usando cables de fibra óptica. Pero en chips de computación, los datos se mueven a gran velocidad por los alambre interiores y luego la velocidad se reduce al paso de una tortuga cuando es enviada de chip a chip en el interior de una computadora. Eliminada la barrera, los diseñadores de computadoras podrán repensar sus nuevas máquinas, amontonando más chips tanto en los sistemas hogareños como en los gigantescos centros de datos.

Además, los chips de silicio-láser, compuestos por una especie de telaraña de luz láser además de alambres metálicos – auguran una infraestructura computacional nacional muchísimo más poderosa y menos cara.

Compartir:

spot_img
spot_img
spot_img
spot_img

Noticias

CONTENIDO RELACIONADO