Un ejército de defensores de los derechos humanos arriesgan sus vidas para proteger las libertades de otros, pero ¿quién los defiende a ellos?
Civil Rights Defenders distribuyó el viernes la primera tanda de pulseras “Natalia Projectâ€, que usan tecnología de GPS y medios sociales para enviar señales de peligro si quien la usa es atacado. Los activistas usan el dispositivo para actuar en zonas de alto riesgo. Si los atacan, pueden disparar la alarma manualmente. Los dispositivos están equipados con un candado de seguridad que hace que se active la alarma en caso de que alguien lo retire por la fuerza.
Una vez activada, la pulsera inmediatamente notifica a las oficinas centrales de Civil Rights Defenders con la ubicación GPS de la víctima en tiempo real, alerta a contactos cercanos ( como otras personas también trabajando en la zona) y a los equipos de rescate. Una vez que se confirma el peligro, las pulseras envían mensajes a Facebook y Twitter para conseguir soporte global y presionar a los atacantes.
“El hecho que todo el mundo se enterará del ataque inmediatamente forma un perímetro defensivo virtual alrededor de los defensores de los derechos humanos que están en peligro, pues esos regímenes quieren evitar la atención y la crítica internacional†dijo la organización en su blog.
El proyecto fue inspirado por Natalia Esterniorva, defensora de los derechos humanos en el Cáucaso que fue asesinada a las 24 horas de ser secuestrada. CRD dijo que si las autoridades adecuadas hubieran sabido antes del incidente, la tragedia podría haberse impedido.