Para llegar a Sotheby’s, lugar de la subasta en París, la dueña tomó un tren, luego un colectivo y después caminó con la caja de zapatos en que lo llevaba. Los administradores de Sotheby´s, advirtiendo que era valioso, le pusieron un precio de base entre 500.000 y 700.000 euros. Se vendió a 20 veces esa cifra: en euros, 16,2 millones. El más alto precio jamás logrado por un artículo en Sotheby’s de París.
Olivier Valmier, experto en arte asiático de Sotheby’s , dijo que el descubrimiento es equivalente a encontrar un Caravaggio.
Está decorado con ciervos, pájaros y otros animales en un bosque y tiene filetes dorados alrededor del pico. Tiene la marca del emperador Qianlong que gobernó China desde 1736 a 1795 y perteneció a la dinastía Qing.
En perfectas condiciones, “es el único ejemplo conocido con tanto detalle”, explicó Valmier. La dueña, por su parte, explicó que la familia lo tenía en el ático porque a sus abuelos no les gustaba y a sus descendientes tampoco. Sabían que tenía valor pero nunca imginaron cuánto
La subasta de la pieza duró más de lo normal porque eran muchas las personas que batallaron para comprarlo.