Las mejores empresas de la década

    PORTADA |

    Por Javier Rodríguez Petersen

    “Las mejores empresas de la década” es un producto novedoso y ambicioso que Grant Thornton Argentina y Mercado presentan aquí por primera vez y que se repetirá cada año. Este ranking de desempeño fue elaborado a partir de un método de medición desarrollado por Grant Thornton Argentina que permite ponderar simultáneamente una serie de variables observables en los Estados de Situación Patrimonial y los Estados de Resultados de las compañías.
    Este primer listado mide el desempeño del período 2000 a 2009. Las compañías que lo integran son las 100 de mayor volumen de ventas entre las que cotizan en bolsa y que, además, tienen presencia bursátil ininterrumpida desde hace por lo menos 10 años y, eventualmente, un balance distinto al de sus controladas.
    Para una mejor comparación, las firmas fueron clasificadas en cinco sectores según las industrias en las que participan: Financieras, donde se encuentran las empresas que se dedican exclusivamente a la actividad financiera y bancaria; Industriales, dedicadas principalmente a la producción industrial; Comerciales, que incluye tanto las de compra-venta de productos como las de servicios; de Infraestructura e inversiones, que reúne las constructoras y las que tienen por actividad principal las inversiones –aun cuando éstas no se concentran en infraestructura–; y, por último, Energía, que abarca las de producción de energía de cualquier tipo.
    Los ratios por los que se analizó el desempeño son 10, agrupados en cuatro grupos: operativos (evolución de las ventas, margen bruto de utilidad y rentabilidad de explotación/ EBITDA), que miden la performance operativa independientemente de la estructura de financiamiento y la política de inversiones; de inversión (crecimiento del CAPEX, del capital de trabajo y de los activos), que apuntan a una mirada de largo plazo a través de la inversión en capital fijo y de trabajo; de endeudamiento (leverage financiero y liquidez corriente), con los que se analiza la creación de valor a través de la política de endeudamiento y la sostenibilidad de la deuda; y de resultados (ROA –retorno de los activos– y ROE –retorno de la inversión–).
    Así, además de un listado en el que se compara la performance de las 100 empresas según el conjunto de ratios estudiados –ponderados de una forma específica que se explica en la nota metodológica–, también es posible separarlas según el sector al que pertenecen y observar cuál fue su desempeño en comparación con otras compañías de la misma industria o, en una ponderación un tanto más clásica, analizar cuáles fueron las firmas que mejor “midieron” a lo largo de la década en cada una de las variables.

    Las primeras
    Tres empresas tan distintas como Tarjeta Naranja, Siderar y Bodegas Esmeralda se revelan como las compañías de mejor desempeño a lo largo de los últimos 10 años entre las firmas que cotizan en la Bolsa de Comercio porteña.
    La compañía de mayor calificación entre todas las del ranking fue Tarjeta Naranja (comercial), que tuvo un excelente desempeño en los ratios operativos y de endeudamiento y uno muy bueno en los de rendimiento. La empresa sumó un total de 58,8 puntos, casi cuatro más que la segunda; el intervalo es el más grande de todo el ranking, con excepción del que hay entre las dos que cierran el listado.
    Las segundas de la lista son dos empresas industriales: el gigante Siderar y Bodegas Esmeralda. Las dos alcanzaron un total de 55 puntos con una performance casual y llamativamente idéntica en todos los ratios salvo en los de liquidez (donde Bodegas Esmeralda tuvo puntaje perfecto) y ROA (donde la ventaja fue de Siderar).
    Luego siguen en el ranking Cresud (infraestructura e inversiones) e Instituto Rosenbuch (industrial) con 52,5 puntos; Gijón (infraestructura e inversiones), con 51,3; la energética Pan American Energy, con 50, y las industriales Mirgor y Ferrum, con 47,5. El décimo puesto es compartido entre la comercial Tarjetas Cuyanas y las industriales Ledesma y Aluar, con 46,3 puntos.
    En rasgos generales, estas primeras 12 compañías comparten el haber tenido una performance entre media y elevada en la mayoría de los ratios. Los puntos más destacados: Tarjeta Naranja tuvo el máximo posible en margen bruto sobre ventas y ROE; Cresud y Gijón, en crecimiento de ventas y liquidez; Bodegas Esmeralda, Instituto Rosenbuch, Ferrum, Ledesma y Aluar, en liquidez; y Tarjetas Cuyanas, en margen bruto sobre ventas.

    Ranking por sectores
    Al clasificar las 100 del ranking según el sector de la economía en el que desarrollan su negocio principal quedan 38 empresas industriales, 27 de infraestructura e inversiones, 14 comerciales, 13 de energía y ocho financieras.
    El primer análisis del listado completo teniendo en cuenta los sectores muestra que entre las 12 primeras hay siete compañías industriales, dos comerciales, dos de infraestructura e inversiones y una de energía. Es decir que, mientras que entre las primeras no hay ninguna financiera, las industriales y las comerciales tienen una presencia proporcionalmente mayor a la que tienen en el listado completo y las de infraestructura y las de energía están apenas por debajo.
    En el otro extremo, entre las de menor desempeño, esto cambia radicalmente: hay sólo una firma comercial mientras que tienen un mayor peso relativo las empresas de energía. Las industriales, las de infraestructura e inversiones y las financieras tienen una presencia similar a la que tienen en el listado completo.

    Infraestructura e inversiones: buenos crecimientos
    El conjunto del sector de infraestructura e inversiones ha tenido buenos crecimientos, en comparación con los demás sectores, tanto en las ventas como en sus activos, con un promedio de 22% y 20% anuales, respectivamente.
    El ranking sectorial lo encabezan Cresud (52,5 puntos) y Gijón (51,3), que, además, ocupan la cuarta y la sexta posición del listado completo. Euromayor de Inversiones y Caputo comparten el tercer puesto (con 45 puntos), mientras que Raghsa y Autopistas del Sol cierran el top six (con 43,8 puntos).
    De las 27 empresas del sector, 14 tiene un puntaje superior al promedio. Las compañías de infraestructura y servicios muestran varias coincidencias: la mayoría tienen un puntaje entre mediano y alto en crecimiento de ventas (Cresud, Gijón y Euromayor, el máximo posible) y casi todas tienen puntaje mediano o bajo en resultados (salvo Inversora Eléctrica de Buenos Aires y Clisa, que muestran una muy buena performance de ROE). En general, aunque con excepciones y cierta dispersión, tienen un desempeño medio en los indicadores de endeudamiento e inversión (salvo en el crecimiento de activos, relativamente elevado).

    Industria: el mejor desempeño promedio
    Como en Infraestructura e inversiones, el sector de compañías industriales tuvo altos crecimientos en ventas (22% anual) y activos (17% anual). El sector también mostró un buen desempeño en lo que se refiere a liquidez ya que en la década analizada contó, en promedio, con más de dos pesos por cada peso de deuda.
    El ranking sectorial lo encabezan Siderar y Bodegas Esmeralda (55 puntos), Instituto Resenbuch (52,5), Mirgor y Ferrum (47,5) y Ledesma y Aluar (46,3). Las siete están entre las 12 primeras del listado de las 100.
    Es el sector de mejor desempeño promedio (con 37,6 puntos). Entre las 37 firmas del sector, hay 21 con puntajes superiores a la media. La performance de las empresas industriales comparte varias similitudes con la de las de infraestructura e inversión: hay en general puntajes entre medianos y altos en crecimiento de ventas y de activos, y medianos y bajos en los ratios de resultados. Pero, en promedio, son bastante más elevados los desempeños de endeudamiento.

    Finanzas: peor performance
    Es el sector con peor desempeño promedio y con una diferencia considerable (32,3 puntos de media), aunque en eso influye también que sea el más chico (al tener sólo ocho empresas, tanto las buenas performances como las malas tienen mayor peso). Tiene además la curva menos constante de crecimiento de ventas, con picos notables en las salidas de las crisis (2002 y 2009).
    El ranking sectorial lo encabeza Banco Macro (con 43,8 puntos), 18º en el ranking general, y el podio lo completan BBVA Francés (38,8), 39º del listado completo, y Santander Río (37,5), 48º entre las 100.
    De las ocho firmas financieras, las tres primeras son las únicas que superan la media general y que están entre las primeras 50. En promedio, el sector tiene la peor performance en los tres ratios operativos, en los dos de resultados y en crecimiento de activos. Se destaca, sin embargo, por tener los mejores índices de endeudamiento, en particular en el leverage financiero, que es el más alto y en el que todas las compañías tienen notas de medias a elevadas.

    Energía: mayor facturación
    El sector de energía es, por mucho, el de mayor facturación; en particular se destacan en este sentido los volúmenes de YPF, Petrobras Energía y Pan American Energy Argentina. En promedio, creció en ventas 22%.
    El ranking sectorial está encabezado por Panamerican Energy (50 puntos), que es la única compañía energética entre las primeras del listado completo (séptima). Le siguen Petrobras Energía y Central Térmica Güemes (42,5 puntos, comparten la 23ª posición). Como particularidad, las tres sumaron 15 sobre 20 puntos posibles en el ratio de crecimiento de ventas: la primera mostró en el período un incremento anual en la facturación de 36%; la segunda, de 27% y la tercera, de 34%.
    De las 13 firmas de energía, seis superan el promedio del ranking. En líneas generales, muestran una buena perfomance en ventas. El promedio del sector es de los más bajos (35,3 puntos). Sin embargo, en casi todos los ratios las medias están cerca de la media general, aunque tiene los más bajos rendimientos en endeudamiento.

    Comercial: elevados resultados
    El conjunto de compañías comerciales se destaca por sus elevados ratios de resultados, con los promedios más altos tanto de ROA como de ROE y varias compañías de performance elevada en esos apartados. Eso compensa, en el promedio de la categoría, el rendimiento en ventas menor al de otros sectores.
    La líder entre las firmas comerciales es también líder del ranking general: Tarjeta Naranja, con 58,8 puntos que surgen de una performance perfecta en ROE y margen de utilidad bruta; muy alta en crecimiento de ventas, crecimiento de activos y leverage financiero, y por encima del promedio en rentabilidad de explotación, crecimiento del capital de trabajo y ROA. La segunda del grupo es una empresa controlada por la primera: Tarjetas Cuyanas, que con 46,3 puntos quedó décima en el listado de las 100. Y tercera terminó el Mercado de Valores de Buenos Aires (Merval), que con 43,8 puntos comparte la 18ª posición del ranking.
    De las 14 compañías comerciales que figuran entre las 100, justo la mitad logró puntajes superiores a la media. En conjunto, estuvieron por debajo del promedio en crecimiento de ventas, crecimiento del capital de trabajo y liquidez. Pero se destacaron en los ratios vinculados al rendimiento con la media más alta en margen bruto sobre ventas, ROA y ROE, así como en crecimiento de activos.

    Ratio por ratio
    Lógicamente, el análisis de cada ratio o grupo de ratios por separado muestra distintos ordenamientos del listado: empresas que en el ranking completo ocupan puestos destacados quedan en algunas variables muy rezagadas con respecto al resto, y otras que están entre las últimas en cuanto al desempeño global figuran entre las líderes de algunos ratios. En este ranking de las 100 mejores empresas de la década, denominamos a esos listados los “cuadros de honor”.

    Ratios operativos
    El “cuadro de honor” de los ratios operativos (crecimiento en ventas, margen bruto sobre ventas y rentabilidad de explotación) lo encabeza Cresud (que estaba cuarta en el ranking general) con 25 puntos sobre 30 posibles. Detrás quedan Tarjeta Naranja y Gijón (23,8 puntos, primera y sexta en el listado completo) y Pan American Energy y Euromayor de Inversiones (22,5 puntos, séptima y 13ª del ranking, respectivamente).
    Cresud, Gijón y Euromayor de Inversiones son además las tres compañías que alcanzaron los 20 puntos posibles en el ratio de crecimiento de ventas, mientras que otras 24 empresas sumaron 15 puntos.
    Cinco firmas lograron los cinco puntos vinculados a la evolución del margen bruto de ventas: Tarjeta Naranja, Tarjetas Cuyanas (décima en el ranking), Mercado de Valores (18ª) y Grupo Financiero Galicia y Telefónica Holding (ambas en el puesto 23). Grupo Financiero Galicia, Telefónica Holding y Banco del Suquía (que es la que cierra el listado cuando se analizan todas las variables) obtuvieron los cinco puntos posibles de rentabilidad de explotación.
    En todos los ratios operativos, el sector de infraestructura y servicios es el de mayor presencia proporcional, seguido en una relación bastante pareja por las compañías de industria y comercio, mientras que las financieras son, en promedio, las de peor desempeño.

    Ratios de inversión
    Como los ratios operativos, los tres vinculados a la inversión (crecimiento del CAPEX y del capital de trabajo y tasa de crecimiento de los activos) suman un total posible de 30 puntos. Aquí el cuadro de honor lo lidera, con 17,5 puntos, Autopistas del Sol, que comparte el 18º lugar del ranking general. Detrás, con 15 puntos, están Siderar y Bodegas Esmeralda, que también comparten el segundo puesto del listado más amplio. Otras 15 compañías llegan a 12,5 puntos.
    Al medir exclusivamente el desempeño en crecimiento de los activos, Pampa Energía, 58ª en el listado de rendimiento global, sorprende con un primer puesto y con 10 puntos sobre 10 posibles. La escolta un extenso pelotón de 7,5 puntos en el que están varios de los primeros del ranking, como Tarjeta Naranja, Siderar, Bodegas Esmeralda, Cresud, Pan American Energy, Mirgor y Tarjetas Cuyanas, y que completan Celulosa Argentina (13º), Euromayor de Inversiones (13º) y Banco Macro (18º).
    Si lo que se tiene en cuenta es el desempeño en crecimiento de capital del trabajo, Autopistas del Sol es la única con puntaje perfecto (10 puntos), mientras que Loma Negra (13ª del ranking), Telefónica Holding (23ª) y Petrolera del Cono Sur y Garavaglio y Zorroaquín (comparten el puesto 79) consiguen 7,5 puntos. En crecimiento del CAPEX, hay 65 firmas que obtienen 2,5 puntos sobre 10 posibles y 31 sin puntaje.
    Entre los mejor posicionados por ratios operativos se destacan claramente las empresas industriales, mientras que entre los que se posicionan peor en el ranking, la proporción no es muy distinta a la del listado de los 100.

    Ratios de endeudamiento
    También en el “cuadro de honor” de los ratios de endeudamiento (leverage financiero y liquidez) una empresa que ocupa un lugar bajo entre las 100 por desempeño global, Goffre, Carbone y Compañía (88ª), sorprende con un contundente primer puesto con 17,5 puntos sobre 20 posibles. Atrás queda un largo grupo con 15 puntos compuesto por varias de las líderes del ranking, como Bodegas Esmeralda, Instituto Rosenbuch, Gijón, Ferrum y Aluar, y otras que están más abajo como Euromayor de Inversiones (13ª), Agrometal (13ª), Raghsa (18ª), Central Térmica Güemes (23ª), Grupo Financiero Galicia (23ª), Compañía Introductora de Buenos Aires (31ª), Colorín (39ª) e Industrias Metalúrgicas Pescarmona (63ª).
    Goffre, Carbone y Compañía y Loma Negra (una de las varias 13ª del ranking) son las que alcanzan los 10 puntos sobre 10 posibles en leverage financiero, seguidas por 16 firmas que suman 7,5 puntos. Al puntaje perfecto en liquidez (10 puntos) llegan 19 firmas: Bodegas Esmeralda, Instituto Rosenbusch, Cresud, Gijón, Ferrum, Aluar y Ledesma entre las líderes del ranking; Agrometal, Raghsa, Merval, Central Térmica Güemes, Grupo Financiero Galicia, Compañía Introductora de Buenos Aires, Domec e Industria Textil Argentina, entre las del medio; y Sociedad Comercial Del Plata, Editorial Perfil, Carlos Casado y Pertrak, entre las que ocupan la parte baja del listado de desempeño más amplio.
    Al medir conjuntamente los dos ratios de endeudamiento, se destacan positivamente las firmas industriales y negativamente las de infraestructura y servicios; tomando exclusivamente el leverage financiero, el liderazgo es copado por las financieras y comerciales; y analizando sólo el desempeño en liquidez, tienen preponderancia las industriales pero también las de infraestructura e inversiones.

    Ratios de resultados
    El “cuadro de honor” de los ratios de rendimiento (ROA y ROE) es encabezado por la líder del ranking, Tarjeta Naranja, con 12,5 puntos sobre 20 posibles. Y hay cuatro empresas que suman 10 puntos: Pan American Energy, Merval (18ª del ranking), Arte Gráfico Editorial Argentino (AGEA, 58ª) e Inversora Eléctrica de Buenos Aires (IEBA, 73ª). Tres de las cinco son firmas comerciales. De las 100 empresas del listado, hay 40 empresas con puntaje 0 y 13 con 2,5.
    Tomando sólo el desempeño en ROA, la primera es el Merval, con 7,5 puntos, por delante de Pan American Energy, Siderar e YPF (39ª del ranking), que logran 5 puntos. Es uno de los pocos ratios en los que se destacan las compañías de energía.
    Midiendo en cambio exclusivamente el ROE, tanto Tarjeta Naranja como Inversora Eléctrica de Buenos Aires consiguen los 10 puntos posibles, mientras que Compañía Latinoamericana de Infraestructura (31ª) y Arte Gráfico Editorial Argentino sacan 7,5 puntos y Pan American Energy, Telefónica Holding (23ª), Cablevisión (23ª), Sideco Americana (58ª) y Sociedad Comercial del Plata (73ª) alcanzan los cinco puntos. Aquí las que se imponen son las empresas de infraestructura e inversiones.

    Análisis por activos
    Pampa Energía, que no terminó entre las primeras del ranking general, sí lo hizo en el de crecimiento de activos, con 10 puntos. Segundas, todas con 7,5 puntos, quedaron Tarjeta Naranja, Siderar, Bodegas Esmeralda, Cresud, Pan American Energy, Mirgor, Tarjetas Cuyanas, Celulosa Argentina, Euromayor de Inversiones y Banco Macro (de las 11: cuatro industriales, tres de infraestructura e inversiones, dos comerciales, una de energía y una financiera).
    Infraestructura e inversiones: La compañía del sector que más creció en activos es Pampa Energía, con una tasa anual promedio de 99,9%. La segunda es Cresud, con 46%. Sin embargo, la tasa de Pampa Energía se explica básicamente en 2006 y 2007 porque un nuevo grupo controlante compró –en 2005– 83,44% del capital social del Frigorífico La Pampa, transformó a PAMP en una sociedad inversora y desarrolladora y amplió el capital social de 6 millones de papeles a 146 millones acciones ordinarias. En cambio, Cresud mantuvo tasas elevadas durante toda la década.

    Industriales: Este sector es en el que se encuentran más parejos los primeros puestos en crecimiento de los activos, lo que deriva de la naturaleza de la industria. A Celulosa Argentina (31% anual promedio), le siguen Bodegas Esmeraldas y Mirgor (ambas con 29%).

    Financieras: Este, en cambio, es uno de los sectores más parejos. Macro registró un promedio de 41%, mientras que Patagonia, el segundo, creció a una tasa anualizada de 21%.

    Energía: Las empresas registraron un crecimiento notable en 2002. Para el conjunto de la década, la que más creció en promedio es Pan American Energy (30% anual), con una tasa sostenida durante los últimos cinco años. Le siguen Central Térmica Güemes (22%) y Petrobras Energía (19%).

    Comerciales: Las tres que más incrementaron sus activos son las mismas tres que más aumentaron sus ventas: Tarjetas Cuyanas (31% anual promedio), Tarjeta Naranja (27%) y Cablevisión (19%).

    Análisis por liquidez
    19 empresas comparten el puntaje perfecto en el ratio de liquidez, que intenta medir la capacidad de la empresa, en el período analizado, para hacer frente a sus deudas. Tienen una distribución llamativamente despareja: de esas 19, 12 son industriales, cinco de infraestructura e inversiones, una comercial y una de energía.

    Infraestructura e inversiones: En el sector hay dos empresas con mucha liquidez: Gijón, que cuenta con $27 promedio en los 10 años por cada peso de deuda, y Grupo Financiero Galicia (con $23,63). Muy lejos de las primeras pero cerca del promedio del sector (que es el mejor) queda Cresud (con $3,07). También mostraron buenos índices Comercial del Plata y Raghsa.

    Industriales:
    Es el sector con mayor cantidad de empresas con 10 puntos en liquidez. La primera es Carlos Casado (con $6 por cada peso de deuda), seguida, muy cerca, por Domec ($5,77) e Industria Textil Argentina ($5,23). También alcanzaron puntaje perfecto Bodegas Esmeralda, Instituto Rosenbuch, Ferrum, Aluar, Ledesma, Agrometal, Compañía Introductora de Buenos Aires, Editorial Perfil y Pertrak.

    Financieras: El sector es uno de los menos líquidos y el líder en el ratio, Banco Hipotecario, alcanza un promedio de apenas $1,40 por cada peso de deuda. Lo siguen Banco Macro y Banco Patagonia, con $1,21 y 1,19 respectivamente.

    Energía: Tomando el promedio del sector, es el menos líquido, con $1,06 pesos por peso de deuda. La única empresa que supera los $2 es Central Térmica Güemes ($2,86). Le siguen YPF ($1,34) y Distribuidora Gas Cuyana ($1,30).

    Comerciales: tiene el segundo promedio en liquidez ($2,31), pese a que el único que alcanza los 10 puntos del ratio es el Mercado de Valores (con $19,75 por cada peso de deuda). Detrás se ubican Goffre, Carbone y CIA. y Boldt ($1,7).

    Desempeño en ventas

    El ratio de crecimiento de ventas es el que más representa la evolución de una empresa y al que mayor ponderación se le dio en este trabajo. Aunque lo que importa en este ranking es el crecimiento y no el volumen de ventas, cabe señalar la diferencia que hay en la facturación de los distintos sectores, claramente superior en el de energía, irregular en el de financieras y menor y de estable tendencia al alza tanto en comerciales como en industriales y en infrastructura e inversiones. Vale además hacer un análisis pormenorizado de los resultados de esta variable en cada sector.
    Infraestructura e inversiones: las tres empresas que mejores ratios lograron –Cresud, Gijón y Euromayor de Inversiones– obtuvieron los 20 puntos posibles en la variable de crecimiento de ventas. Cresud las incrementó a un ritmo superior a 50% anual; tuvo mucha incidencia en el promedio el último ejercicio (2009), en el que las ventas crecieron casi 350%, lo que hará que seguramente se ubique en un lugar privilegiado en las próximas ediciones del ranking. Las ventas de Gijón se incrementaron a un promedio superior a 50%. Y también Euromayor de Inversiones aumentó por encima de 50% anual sus ventas.
    Industriales: la mejor en este sector en cuanto al crecimiento de sus ventas fue Mirgor, con un ritmo de 39% anual, casi el doble del promedio del grupo de compañías industriales. En segundo lugar quedó Alpargatas, que creció a una tasa anualizada de 37% –con niveles especialmente altos entre 2002 y 2004–. Tercera quedó Celulosa Argentina, con un promedio de 34% al año, también muy por encima del promedio del sector.
    Financieras: el que más creció en sus ingresos anuales fue Banco Santander Río, con una tasa anual de 47% (y un gran impulso en 2009), seguida por Banco Macro, con un promedio de crecimiento de 45% al año. El resto de las compañías del rubro quedaron muy lejos en cuanto a la evolución de su facturación, lo que incide particularmente en el promedio del sector, que es el que tiene menor cantidad de empresas en el ranking.
    Energía: es el sector que más abultados ingresos tiene de los integrados en el ranking, lo que se explica por el tamaño de las compañías que lo conforman. La empresa de mayor crecimiento fue Pan American Energy Argentina, con una tasa de 36% anual, seguida por Central Térmica Güemes y Petrobras Energía, con tasas de 34% y 27%, respectivamente.
    Comerciales: es el sector con menor crecimiento en sus ingresos en la década estudiada. Tarjetas Cuyanas lidera con una tasa de 30% anual, seguida por Cablevisión y Tarjeta Naranja, con 28% y 27%, respectivamente.

     

    Reflexión

    Por Adelmo J. J. Gabbi*


    Adelmo Gabbi

    Resultan muy interesantes las conclusiones a las que se llegan gracias a la investigación realizada. Claramente demuestra dos axiomas bursátiles que los que nos dedicamos a esto tenemos grabados en nuestras venas.
    El primero es que todo sistema económico tiene sectores ganadores y perdedores, y que luego las aptitudes que cada empresa demuestre para adaptarse al contexto sellarán su rendimiento en el futuro.
    Uno de esos axiomas a que me refería es cuando se ve claramente un sector al que le está yendo muy bien, que las ventajas comparativas le juegan muy a favor, invierte entonces en sus proveedores. Claramente el sector automotriz, el consumo y las exportaciones con valor agregado fueron las estrellas de la década. Los números de sus proveedores, como Siderar, el financiamiento del consumo a través de Tarjeta Naranja y Bodegas Esmeralda lo demuestran.
    Pero otro de los axiomas interesantes es que las cotizaciones no siempre reflejan la performance según balances de las empresas. Porqués hay varios. Uno de ellos es que muchos de los datos que se extraen de los balances, incluso en este informe, no reflejan la realidad de una compañía. El ejemplo más claro es el no ajuste por inflación de los activos de las empresas, esto genera distorsiones desde el pago de impuesto a las ganancias, hasta el valor de una maquinaria.
    Por lo tanto, uno tiene que aprender a completar estos datos de análisis de fundamentos con la percepción de las expectativas de los inversores, porque como digo siempre la bolsa sobretodo es ¡futuro!
     
    *Adelmo J.J. Gabbi es presidente de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.

     

    Anexo metodológico

    Dado que esta es la primera vez que Grant Thornton Argentina y Mercado realizan este complejo producto, consideramos necesario extendernos en la descripción de la metodología empleada, creada especialmente para este informe. Aquí, las premisas, definiciones y fórmulas utilizadas.

    El método propuesto por Grant Thornton Argentina utiliza un conjunto de índices económicos y financieros valorados según su rendimiento por una tabla de puntajes y ponderados según la importancia de cada uno para el resultado final buscado.
    Dado que la valoración del peso relativo de cada índice implica algún grado de subjetividad, se garantizó la imparcialidad manteniendo la ponderación de los índices propuestos antes de tomar contacto con la información de las empresas, que fue provista por la doctora Nora Ramos y la contadora Alicia Grandamarina, de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.
    Para la elaboración del ranking se tomó información pública de las empresas y se desarrollaron indicadores para medir su evolución desde varias perspectivas: desde los resultados, la operatividad, la inversión, y el endeudamiento y liquidez. Así, cada empresa obtiene un resultado según la importancia que se le asigna a cada “perspectiva” en el rendimiento global de la empresa.
    Tras la elaboración de esas cuatro “perspectivas” o grupos de ratios, Grant Thornton Argentina elaboró un sistema de puntuación para cada ratio:

    Índices operativos
    Miden la performance operativa de la firma independientemente de la estructura de financiamiento y la política de inversiones. Las variables seleccionadas fueron crecimiento de ventas, margen bruto y EBITDA. En conjunto, se les asignó una ponderación de 30%.
    A la tasa de crecimiento de las ventas se le asignó una ponderación de 20%; el ratio que compara el crecimiento anual de la facturación de la empresa y su performance a lo largo de la década fue evaluada a través de su media geométrica; como para este índice no existe teoría de un porcentaje límite de oscilación, el puntaje se asignó en base a tasas de crecimiento consideradas razonables.
    El índice de rentabilidad bruta sobre ventas mide, en forma porcentual, la porción de las ventas resultante luego de detraer el costo de los bienes o servicios prestados. Se le asignó una ponderación de 5%.
    Finalmente, la rentabilidad de la explotación o EBITDA sobre ventas (con otro 5%) mide la proporción que suponen los beneficios operativos sobre las ventas de las empresas. Este grupo de ratios valora una mejor performance cuando los ratios alcanzan valores más altos.

    Índices de inversión
    Son tres ratios a los que se les asignó una ponderación de 10% a cada uno y que apuntan a una mirada de largo plazo. Miden la inversión en capital fijo y de trabajo y fueron normalizados por sus activos (activo total y no corriente, según el caso). Si bien un aumento de la inversión implica menos caja para los accionistas, se supone deseable que haya un crecimiento. Los ratios incluidos fueron la tasa de crecimiento de los activos que representan la inversión total de la empresa (calculada a través de su media geométrica); el crecimiento del CAPEX, un índice que mide el crecimiento de las erogaciones o inversiones en capital fijo, que es el que creará beneficios para la compañía; y el crecimiento del capital de trabajo, ya que el mismo denota el aumento en la actividad de la empresa. Aunque el último es un indicador del corto plazo, se lo promedió en el período bajo estudio para tener una medida de su desempeño.

    Índices de estructura de capital
    Son dos (leverage financiero y liquidez) y también se les asignó una ponderación de 10% a cada uno. Analizan la creación de valor a través de la política de endeudamiento y la sostenibilidad de la deuda. El leverage financiero representa el efecto de los resultados financieros de la empresa combinado con el nivel de endeudamiento, por lo que permite medir la evolución del resultado de acuerdo al endeudamiento. El índice de liquidez mide la capacidad de pago de la compañía para hacer frente a sus deudas de corto plazo. En ambos casos se tomó el promedio de los 10 años.

    Índices de resultados

    Buscan dar luz sobre el rendimiento de los activos y la rentabilidad sobre el capital invertido. Se eligió el Retorno del Activo (ROA), que indica la eficiencia del uso de los activos de la compañía, y el Retorno sobre la Inversión (ROE), que mide en rendimiento del capital propio de la empresa, es decir la rentabilidad que obtienen los accionistas. En ambos se buscaron porcentajes razonables de rendimiento como base para su valoración. Se les asignó una ponderación de 10% a cada uno.

    La selección de las empresas
    Grant Thornton Argentina tomó una muestra de 140 empresas con cotización publica en la Bolsa de Comercio, que facilitó la información contable histórica del Estado de Situación Patrimonial y Estado de Resultados (BG y EERR). A partir de allí se aplicaron una serie de parámetros y condiciones para llegar al listado de empresas que aquí se presenta.
    La primer condición fue que las compañías tuvieran una historia continua en la bolsa durante los 10 años en los que se basa el estudio (2000-2009). Eso implicó dejar fuera de la base de estudio a aquellas empresas que discontinuaron su cotización en la entidad antes nombrada y no presentaron sus respectivos EECC. Este filtro excluyó a firmas como Telecom Personal, Alto Paraná y Tenaris, que están entre las de mayor facturación en 2009, y a otras como los bancos Supervielle y Comafi y Grupo Clarín.
    La segunda condición fue no considerar a aquellas empresas que tienen como única actividad controlar a otras compañías que también están en la muestra para evitar falsas posiciones con información duplicada. Sí se mantuvieron las controlantes con más de una inversión. Por este filtro se eliminaron del listado Nortel Inversora (que controla a Telecom Argentina), Gas Argentino (Metrogas), Compañía de Inversiones de Energía (Transportadora de Gas del Sur) y Electricidad Argentina (Edenor). Tarjeta Naranja es controlante de Tarjetas Cuyanas, pero no se la eliminó porque cumple con los criterios explicados.
    Por último, de entre las que pasaron los dos filtros se tomaron las 100 que más facturaron en 2009.

    Sorteo de obstáculos
    En este trabajo de investigación hubo que sortear diversos obstáculos y tomar varias decisiones a medida que se avanzó en la investigación:
    Ratios comparables: para poder comparar los ratios, éstos fueron normalizados dándoles una puntuación, según su desempeño, que va del 0 al 100. Para dar con el resultado final se multiplicó la puntuación del ratio por su respectiva ponderación. Así se buscó limitar la posibilidad de que una excelente performance en un ratio compensara una pálida gestión en otro.
    Balances consolidados: en los casos en que las compañías presentaron información consolidada en sus últimos 10 balances anuales, se prefirió tomar esa información.
    Ejercicios irregulares: en los casos que se encontraron períodos contables irregulares, por cambio de fecha de cierre del ejercicio, se tomó la decisión de descartarlos y tomar los ejercicios que contaran con el año calendario completo para no afectar el resultado de los ratios.
    Inflación del período: si bien la inflación fue una variable siempre presente en la última década, no se tuvo en cuenta ya que de todos modos afecta a todas las empresas de manera ecuánime.
    Resultado erróneo en la fórmula: en los casos en que las fórmulas no se hayan podido calcular, por estar dividiendo por cero, se eliminaron los resultados para poder calcular los promedios.