<p>El <em>Boston Consulting Group</em> (BCG) se anima incluso a predecir que el mercado de las mujeres será el que encabece la economía post recesión, gracias a un estimado de US$ 5 billones (millones de millones) en ingresos que percibirán en los próximos cinco años. El ingreso total de los hombres en el mundo – calculado en US$ 23.400 billones – todavía más que duplica el de las mujeres — US$ 10.500 billones — pero esa brecha se achicará debido a que en los próximos cinco años se acortará también la distancia entre los sueldos de ambos sexos y además aumentará el empleo femenino. <br />
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Eso significa que serán las mujeres las encargadas de impulsar las compras, y como esperan algunos economistas, la recuperación económica. Ese crecimiento representa el mayor mercado emergente en la historia del planeta: más del doble el tamaño de los más activos mercados en desarrollo, China e India combinadas. <br />
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Es un cambio sísmico y su impacto — que pocos líderes en el mundo comprenden cabalmente – será amplio y profundo. Un informe reciente de <em>Goldman Sachs</em> titulado "El poder de la cartera” proclama a las mujeres el motor económico del futuro, y señala que su gasto futuro, que tiende a concentrarse más en salud, educación y bienestar infantil, “debería sostener el desarrollo de capital humano” más que el gasto de los hombres, y así, alimentar el crecimiento económico en los próximos años”. <br />
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Aunque intuitivamente se sabe que el lugar de la mujer en el mundo ha subido en las últimas décadas, las cifras son contundentes. La tasa de alfabetización mundial, antes 30% abajo, está ahora muy cerca de la de los hombres. En las universidades (Estados Unidos, Unión Europea y muchos países en desarrollo) son mayoría y en los niveles de educación primaria y secundaria van parejo con los varones. La participación en el trabajo creció exponencialmente, no sólo en los países ricos sino también en muchos en vías de desarrollo. 70% de las mujeres en países como China y Vietnam ahora trabaja. <br />
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En realidad, las mujeres ya toman la mayor parte de las decisiones de compra del mundo. BCG estima que controlan unos US$ 12 billones de los US$ 18.400 billones en gasto anual de consumo, y ese porcentaje podría subir a medida que la clase ascendente de las jóvenes profesionales aventaje a sus pares masculinos en riqueza y estatus. En los países desarrollados, ya hay un cuadro de élite de mujeres urbanas que son más poderosas que sus colegas hombres. Michael J. Silverstein, socio de BCG, dice que hay un nuevo grupo en crecimiento y es el de mujeres jóvenes que tuvieron la misma educación que los varones y comenzaron con los mismos sueldos. Si este nuevo grupo sigue por la vía rápida, el número de mujeres ocupando el cargo de CEO en las 500 de Fortune crecerá de 38 a más de 100 en los próximos 10 años. <br />
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El ascenso de la mujer como gran mercado que cruza todas las fronteras, podría tener implicancias tan profundas como el ascenso de China e India. Hay enormes volúmenes de investigaciones que sugieren que los patrones de gasto de las mujeres podrían ser exactamente lo que necesita el mundo en este momento. Si se las compara con los hombres, las mujeres tienden a gastar más en cosas relacionadas con el bienestar de la gente, como salud y educación. También ahorran más y muestran una conducta financiera menos inclinada al riesgo. <br />
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Las mujeres también podrían tener un papel importante en la reformulación de negocios como el de los servicios financieros. La propensión femenina al ahorro podría alimentar el crecimiento de servicios bancarios en países como India, donde casi la mitad de los activos familiares son físicos: tierras o maquinaria. <br />
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Mientras tanto, a medida que van ganando poder político, también podría haber cambios en el gasto macroeconómico. Un estudio del parlamento británico descubrió que desde 1997, cuando el país duplicó la representación femenina en el gobierno a 18,2%, los temas que interesan a las familias, como acreditación impositiva, salud y educaciòn recibieron más dinero y más atención.</p>
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El gran mercado de la mujer
El único verdadero mercado emergente que se detecta en el mundo entero es el de las mujeres. Economistas y consultores coinciden en que ése podría convertirse en el más grande y poderoso de todos.