El equipo realizó una serie de experimentos que muestran un químico que reduce la neuroinflamación y que podría tener la posibilidad de impedir los cambios en la memoria y en la conducta asociados con la enfermedad que afecta a ,iles de millones de personas en todo el mundo.
Un sistema inmunológico híperctivo puede resultar5 en una inflamación crónica, que está ligada al Alzheimer. Estos nuevos descubrimientos ponen en evidencia que la inflamación no es un resultado del Alzheimer sino un causante de la enfermedad.
Con una población cada vez más envejecida y sin nuevos tratamientos contra la enfermedad desde hace décadas, la necesidad de encontrar tratamientos que desaceleren o detengan el progreso de la enfermedad es una prioridad de la Alzheimer´s Society-
En un experimento, los investigadores analizaron el tejido de cerebros sanos y cerebros de pesonas con Alzheimer. Los de personas enfermas tenían altos niveles de microglia, o células inmunes, que sugerían inflamación cerebral.
Las moléculas que regulan el número de microglia se hacían más activas a medida que aumentaba la enfermedad, resultando en niveles más altos de inflamación.
En otro experimento, los investigadores mostraron que el químico conocido como GW2580 reducía la pérdida de memoria y los problemas de conducta en ratones con Alzheimer.
Administraron inhibidores a esos ratones para impedir que los microglia se multiplicaran y descubrieron que la progresión de la enfermedad se detenía una vez que los números de microglia se estabilizaban.
Por lo general la gente con Alzheimer sufre un colapso en la comunicación entre las células del cerebro, algo que el inhibidor ayuda a impedir. Los ratones tratados con una droga que contiene el GW2580 mostraron menos problemas de memoria y de conducta que los ratones no tratados.
Hay mucho entusiasmo sobre este descubrimiento pues sería un avance luego de años sin novedades interesantes.