Una pintura amontonada junto a muchas otras en el depósito de una galería de arte de Iowa, resultó tener 400 años de antigüedad y probablemente un valor millonario.
En 2016 Robert Warren, director ejecutivo del complejo artístico Hoyt Sherman Place en Des Moines, Iowa, revolvía en el depósito de su galería cuando se topó con una vieja pintura al óleo de figuras mitológicas desnudas arrumbada en un rincón. Había sido pintada sobre madera y tenía varias rajaduras.
No le dio mucha importancia por su deterioro hasta que vio una calcomanía de subasta pegada en el reverso de la madera.
Luego averiguó que no era un sticker de subasta sino una etiqueta que indicaba que el cuadro alguna vez había sido exhibido en el Metropolitan Museum of Art de Nueva York.
Ya un poco más interesado siguió el hilo de la información y supo que era obra del artista holandés Otto van Veen. Se titulaba Apolo y Venus, y había sido pintada en el año 1600.
La obra de van Veen figura en la mayoría de los grandes museos del mundo; entre ellos, la Portrait Gallery en Londres, el Louvre en París y el museo Rubens. Además, sus pinturas han sido valuadas entre 4 y 17 millones de dólares.
Warren averiguó que el Apolo y Venus había sido prestado al Met por un hombre llamado Nason Collins. Cuando Collins se mudó a Des Moines a principios de 1900, se llevó su cuadro con él. Su nieta donó la pintura, junto con otras cuatro, al Des Moine Women’ Club en los años 1920.
La sospecha ahora es que el cuadro permaneció escondido porque se lo consideraba indecente en aquellos años. “En aquel momento, no había ninguna otra pintura en toda la colección de 54 cuadros que mostrara desnudos”, dice Warren.
Aunque todavía no se ha determinado el valor aproximado de la pieza, Warren dice que no hay planes de venderlo todavía. Hoyt Sherman Place realizó una exhibición privada para presentar el cuadro y la galería ahora tiene proyectado ponerla en exhibición en forma permanente.