Vía libre para Telecom Italia

El tribunal romano de Lazio suspendió el bloqueo de la adquisición por parte de la firma italiana y la editora Seat Pagine Gialle de los dos canales de TMC y autorizó la creación de un nuevo grupo privado de telecomunicaciones.

8 marzo, 2001

(EFE).- El Tribunal Administrativo Regional (TAR) del Lazio (cuya capital es Roma) acogió ayer (miércoles 8) el recurso de la compañía telefónica Telecom Italia contra el veto impuesto por la Autoridad para la Garantía de las Comunicaciones, que le impedía la compra de la cadena de televisión Telemontecarlo (TMC).

La decisión del TAR suspende el bloqueo de la adquisición por parte de Telecom Italia y la editora Seat Pagine Gialle de los dos canales de TMC y permite la creación del que será el segundo grupo privado de telecomunicaciones del país.

En su veto, la Autoridad para la Garantía de las Comunicaciones alegaba que la operación, por valor superior a los US$ 500 millones, violaba la ley que prohíbe comprar emisoras de radiotelevisión a una sociedad titular de una concesión pública de telecomunicaciones (Telecom).

La inesperada decisión del TAR, que estaba prevista para el próximo día 28, ha sido acogida con sorpresa por la Autoridad, que sin embargo no ha querido comentarla hasta que hoy se conozcan las motivaciones de la sentencia.

Los jueces administrativos ya se habían pronunciado en el mismo sentido, aunque de forma cautelar, el pasado 31 de enero, cuando concedieron un plazo 15 días al organismo para revisar sus argumentos.

En aquella ocasión, el TAR argumentó que Telecom ha dejado de ser formalmente concesionaria de un servicio público de telecomunicación.

El proceso de fusión del grupo comenzó en agosto de 2000, cuando Seat Pagine Gialle llegó a un acuerdo con TMC para comprar 75% de la cadena, mientras la editora culminaba su fusión con el mayor operador italiano de Internet, Tin.it, filial de Telecom.

Mediaset, sociedad del imperio del empresario y líder de la oposición italiana Silvio Berlusconi, se posicionó en contra de la operación, que abrirá otro frente en la competencia mediática.

También manifestaron su oposición la principal asociación de consumidores, Codacons, y una compañía de acceso a Internet, que consideran que la operación supone una concentración de medios peligrosa para el libre mercado.

Sin embargo, la Autoridad para la Libre Competencia dio su apoyo a la adquisición aunque con algunas condiciones, que pretendían superar las reticencias de la Autoridad para la Garantía de las Telecomunicaciones.

El objetivo de esas reservas era impedir que la operación suponga “un reforzamiento para el Grupo Telecom de una posición dominante, tal que elimine o reduzca de manera sustancial y duradera la competencia en varios mercados de servicios”, como los de acceso a Internet para usuarios y recogida de publicidad en las guías telefónicas y a través de la red.

(EFE).- El Tribunal Administrativo Regional (TAR) del Lazio (cuya capital es Roma) acogió ayer (miércoles 8) el recurso de la compañía telefónica Telecom Italia contra el veto impuesto por la Autoridad para la Garantía de las Comunicaciones, que le impedía la compra de la cadena de televisión Telemontecarlo (TMC).

La decisión del TAR suspende el bloqueo de la adquisición por parte de Telecom Italia y la editora Seat Pagine Gialle de los dos canales de TMC y permite la creación del que será el segundo grupo privado de telecomunicaciones del país.

En su veto, la Autoridad para la Garantía de las Comunicaciones alegaba que la operación, por valor superior a los US$ 500 millones, violaba la ley que prohíbe comprar emisoras de radiotelevisión a una sociedad titular de una concesión pública de telecomunicaciones (Telecom).

La inesperada decisión del TAR, que estaba prevista para el próximo día 28, ha sido acogida con sorpresa por la Autoridad, que sin embargo no ha querido comentarla hasta que hoy se conozcan las motivaciones de la sentencia.

Los jueces administrativos ya se habían pronunciado en el mismo sentido, aunque de forma cautelar, el pasado 31 de enero, cuando concedieron un plazo 15 días al organismo para revisar sus argumentos.

En aquella ocasión, el TAR argumentó que Telecom ha dejado de ser formalmente concesionaria de un servicio público de telecomunicación.

El proceso de fusión del grupo comenzó en agosto de 2000, cuando Seat Pagine Gialle llegó a un acuerdo con TMC para comprar 75% de la cadena, mientras la editora culminaba su fusión con el mayor operador italiano de Internet, Tin.it, filial de Telecom.

Mediaset, sociedad del imperio del empresario y líder de la oposición italiana Silvio Berlusconi, se posicionó en contra de la operación, que abrirá otro frente en la competencia mediática.

También manifestaron su oposición la principal asociación de consumidores, Codacons, y una compañía de acceso a Internet, que consideran que la operación supone una concentración de medios peligrosa para el libre mercado.

Sin embargo, la Autoridad para la Libre Competencia dio su apoyo a la adquisición aunque con algunas condiciones, que pretendían superar las reticencias de la Autoridad para la Garantía de las Telecomunicaciones.

El objetivo de esas reservas era impedir que la operación suponga “un reforzamiento para el Grupo Telecom de una posición dominante, tal que elimine o reduzca de manera sustancial y duradera la competencia en varios mercados de servicios”, como los de acceso a Internet para usuarios y recogida de publicidad en las guías telefónicas y a través de la red.

Compartir:
Notas Relacionadas

Suscripción Digital

Suscríbase a Mercado y reciba todos los meses la mas completa información sobre Economía, Negocios, Tecnología, Managment y más.

Suscribirse Archivo Ver todos los planes

Newsletter


Reciba todas las novedades de la Revista Mercado en su email.

Reciba todas las novedades