<p>Edwards escribió un libro sobre las posibilidades de transformación e innovación inherentes en este nexo. El libro se llama ArtScience: Creativity in the Post-Google Generation (2007). En su cátedra invita a sus alumnos a afrontar los problemas de la vida inventando soluciones extraídas o de las artes o de las ciencias o de ambas. El 8 de noviembre pasado presidió la apertura del ¡Laboratorio de Harvard”, que promete reunir a toda la comunidad Harvard. <br />
<br />
The basement of 52 Oxford Street (the new Northwest Science Building) had been transformed into a gallery for displays of student work and discussion of the Laboratory’s underlying concepts. But when the evening ended, so did this installation; El Laboratorio es un espacio conceptual y virtual para el encuentro de mentes. Cuando hace falta espacio físico, para exhibiciones o la “noche de las ideas” que Edwards tiene planeadaSerá el edificio Northwest. <br />
<br />
Con financiamiento de diversas universidades Edwards diseño un plan inicial de tres años: el primer año se concentra en conctar con la comunidad Harvard, el segundo y tercero integran el público a la conversación. <br />
<br />
Por encima de todo, Edwards y sus colaboradores esperan contrarrestar la tendencia académica a encasillar a la gente en disciplinas con fronteras claras y no porosas. Una vida con ideas es mucho más entusiasmante cuando es desordenada, el proyecto celebra la complejidad y la ambigüedad, dijo Peirce profesor de tecnología y Venkatesh Narayanamurti (profesor de tecnología y políticas públicas y ex decano de SEAS): “Estamos aquí esta noche para celebrar la complejidad y la ambigüedad y su rol en la definición del futuro.”</p>
<p> </p>
Un laboratorio para mezclar arte y ciencia
Para David Edwards, profesor de la práctica de ingeniería bioquímica en la universidad McKay, la intersección de arte u ciencia representa una mina de oro de creatividad.