(EFE).- El presidente de Telecom Italia, Roberto Colaninno, aseguró hoy (viernes 6) que su compañía está dispuesta a colaborar con otras adjudicatarias de licencias de telefonía UMTS para abaratar los costos de puesta en servicio de esa tecnología.
“Estamos abiertos a cualquier propuesta que vaya en el sentido de la competencia y la competitividad”, aseguró Colaninno, en respuesta a la hipótesis de acuerdos que permitan hacer frente a los enormes gastos derivados de las infraestructuras y tecnología necesarias para prestar ese servicio de última generación.
En Italia, Telecom consiguió en octubre pasado, a través de su filial Tim, una de las cinco licencias subastadas por el Gobierno para la explotación de la telefonía UMTS, junto a los consorcios Ipse 2000, controlado por la española Telefónica, y Andala y otros dos gestores italianos de telefonía móvil convencional, Omnitel y Wind.
Colaninno se declaró a favor de desgravaciones que permitan compensar a los operadores del sector de las fuertes cantidades que se verán obligadas a desembolsar, como su propia compañía, que tiene previsto destinar unos 30.000 millones de euros (aproximadamente US$ 34.100 millones) a infraestructuras industriales y financieras.
(EFE).- El presidente de Telecom Italia, Roberto Colaninno, aseguró hoy (viernes 6) que su compañía está dispuesta a colaborar con otras adjudicatarias de licencias de telefonía UMTS para abaratar los costos de puesta en servicio de esa tecnología.
“Estamos abiertos a cualquier propuesta que vaya en el sentido de la competencia y la competitividad”, aseguró Colaninno, en respuesta a la hipótesis de acuerdos que permitan hacer frente a los enormes gastos derivados de las infraestructuras y tecnología necesarias para prestar ese servicio de última generación.
En Italia, Telecom consiguió en octubre pasado, a través de su filial Tim, una de las cinco licencias subastadas por el Gobierno para la explotación de la telefonía UMTS, junto a los consorcios Ipse 2000, controlado por la española Telefónica, y Andala y otros dos gestores italianos de telefonía móvil convencional, Omnitel y Wind.
Colaninno se declaró a favor de desgravaciones que permitan compensar a los operadores del sector de las fuertes cantidades que se verán obligadas a desembolsar, como su propia compañía, que tiene previsto destinar unos 30.000 millones de euros (aproximadamente US$ 34.100 millones) a infraestructuras industriales y financieras.