(DYN).- Más de la mitad de la producción actual de soja en el mundo proviene de cultivos genéticamente mejorados y en la Argentina, principal exportador de harina y aceite de la oleaginosa, 85% de los cultivos corresponde al grano de esas características, aseguró hoy (lunes 26) el director de la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA), Víctor Castro.
El empresario puntualizó que gracias a la biotecnología, durante el último año, el país ahorró más de US$ 200 millones en la producción sojera nacional, e incrementó en alrededor de US$ 180 millones la de maíz.
Las promesas de la biotecnología, subrayó, residen en aumentar la productividad y reducir costos, generar innovaciones y mejoras en los alimentos y conducir a prácticas agrícolas más ecológicas, además de contribuir a la agricultura sostenible, que utiliza recursos con cuidado del medio ambiente y sin hipotecar a las generaciones futuras.
(DYN).- Más de la mitad de la producción actual de soja en el mundo proviene de cultivos genéticamente mejorados y en la Argentina, principal exportador de harina y aceite de la oleaginosa, 85% de los cultivos corresponde al grano de esas características, aseguró hoy (lunes 26) el director de la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA), Víctor Castro.
El empresario puntualizó que gracias a la biotecnología, durante el último año, el país ahorró más de US$ 200 millones en la producción sojera nacional, e incrementó en alrededor de US$ 180 millones la de maíz.
Las promesas de la biotecnología, subrayó, residen en aumentar la productividad y reducir costos, generar innovaciones y mejoras en los alimentos y conducir a prácticas agrícolas más ecológicas, además de contribuir a la agricultura sostenible, que utiliza recursos con cuidado del medio ambiente y sin hipotecar a las generaciones futuras.