sábado, 28 de diciembre de 2024

Muse Capital y otras inversiones en energías alternativas

spot_img

Desde hace mucho, Gary Greenberg se especializa en inversiones globales. Entre ellas, Asia oriental y áreas no convencionales. En Londres, donde maneja Muse Capital –cartera de US$ 60.000 millones fundada en 2003-, dio detalles de su negocio.

<p>Sus resultados muestran altibajos, porque la firma se centra en zonas no bien explotadas. Pero su actividad se cifra en la creciente puja global por combustibles y fuentes energ&eacute;ticas alternativas. En particular, compatibles con aire m&aacute;s di&aacute;fano y agua m&aacute;s limpia. Eso lleva a recursos renovables, por ejemplo energ&iacute;a solar o e&oacute;lica y biomasa. No obstante, &ldquo;la falta de perfiles claros explica que a&uacute;n no nos centremos en biocombustibles&rdquo;, se&ntilde;alaba.</p>
<p>La helioenerg&iacute;a es interesante como colocaci&oacute;n, pues existen posibilidades de hacer diferencia en polisilicones &ndash;hay escasez- y otros elementos. Sin embargo, &ldquo;existen complicaciones tecnol&oacute;gicas, en t&eacute;rminos de eficiencia, porque se trata de un sector poco desarrollado, con altos costos de generaci&oacute;n. Por el contrario, las fuentes e&oacute;licas compiten mejor con otras opciones: hoy ya es factible obtener energ&iacute;a a cinco centavos el kilovatio&rdquo;. Pero el factor decisivo ser&aacute;n &ldquo;tecnolog&iacute;as rupturistas, que desaten una ola de cambios en las econom&iacute;as de escala y tornen la energ&iacute;a e&oacute;lica en una inversi&oacute;n mucho m&aacute;s interesante&rdquo;.</p>
<p>Ahora bien, &iquest;de qu&eacute; cambios se trata? &ldquo;La electricidad &ndash;apunta Greenberg- es dif&iacute;cil de almacenar. Puede acumularse en pilas o bater&iacute;as, pero las de gran escala son en extremo ineficientes. En cuanto al viento, si sopla de nueve de la ma&ntilde;ana a cinco de la tarde, muy bien, porque casi todos pueden aprovecharlo. Pero, cuando lo hace de noche pierde utilidad. Por ende, si fuese factible almacenarlo, habr&iacute;a una revoluci&oacute;n en el segmento&rdquo;.</p>
<p>Ya hay empresas que trabajan en el tema. Una de ellas ha logrado transformar electricidad en hidr&oacute;geno y reconvertirla cuando es preciso, empleando una tecnolog&iacute;a muy eficiente en costos. Esto ocurre justamente mientras General Motors, Ford o Toyota buscan c&oacute;mo ingresar a una &ldquo;econom&iacute;a del hidr&oacute;geno&rdquo;. Pero el problema es c&oacute;mo generarlo en escala dom&eacute;stica, para usarlo en el coche, pues nadie querr&iacute;a ver enormes ductos recorriendo el pa&iacute;s de punta a punta: ser&iacute;a tan caro como peligroso.</p>
<p>&iquest;Existe una soluci&oacute;n capaz de generar energ&iacute;a mediante una peque&ntilde;a turbina e&oacute;lica en el techo de la casa o lugares parecidos, para luego convertirla en hidr&oacute;geno v&iacute;a un electrolizador? Por supuesto, ello implicar&iacute;a un auto a hidr&oacute;geno o, como alternativa, alimentar la casa mediante una c&eacute;lula electr&oacute;gena. En verdad, algo as&iacute; se hace ya en Gran Breta&ntilde;a.</p>
<p>&nbsp;</p>

<p>La compañía ITM Power desarrolló una membrana para instalar electrolizadores, hecha de polímero permeable al combustible y similar a una lente de contacto. Resulta mucho más barata que las corrientes en los dispositivos a células electrógenas e ITM la ha sometido a siete mil horas de ensayo. Este detalle importa, pues es clave para los costos de capital, que se amortizan durante la vida útil del electrolizador: cuanto más larga, más barata resulta la energía generada.</p>
<p>En este punto ¿hay plazos para comercializar el electrolizador? La empresa estuvo ensayando membranas hasta fines de 2007. Ahora, debe ajustar el costo por kilovatio/hora a menos de US$ 200. La última proyección era 700, hace quince meses. ITM tiene varias metas para este año entrante. Una de ellas es reducir el platino en las células. Greenberg es optimista, sin olvidar que –años atrás- varias compañías dedicadas a esas células fracasaron e hicieron un papelón bursátil.</p>
<p>Esta clase de firmas ligadas es que sus tecnologías no necesitan subsidios oficiales. Pero sí precisan infraestructura para llevar la electricidad de zonas remotas y desérticas a áreas pobladas, especialmente en geografías como las de Rusia, Estados Unidos, Canadá, China, India o Brasil.</p>
<p>Entonces ¿qué clase de “eolocompañías” le interesan a Muse? Por ejemplo, Vestas Wind Systems (Dinamarca), la mayor de ellas en este momento. La firma pasó malos tiempo hace pocos años, por centrarse en participación de mercado y no en su tecnología única. Obviamente, no leían a Michael Porter.</p>
<p>En general, el sector puede expandir ventas de 15 a 20% anuales entre 2008 y 2012. Sus utilidades brutas debieran subir a razón de 30% anual. A fines del semestre anterior, sus papeles se negociaban en promedio quinces veces por encima de las utilidades previstas para 2008.</p>
<p>En tanto China, Vietnam e India sigan creciendo, la demanda de hidrocarburos se disparará en los próximos quince a veinte años. Mientras tanto, Gran Bretaña publicó el “informe Stern”, que prevé cambios climáticos alarmantes, cuando no terminales. Ambos factores obligaron a que los gobiernos más reticentes (Japón, China, India, Rusia, Brasil, EE.UU. admitiesen la gravedad del recalentamiento planetario y la dependencia de combustibles fósiles no renovables.</p>
<p>ITM y Vestas están lejos de ser opciones únicas para el mercado inversor. Una empresa india, Suzlon Energy, ha tenido bastante éxito en el subcontinente y entra ya en la Unión Europea, EE.UU. y China. Sólo el año pasado, creció 45%, o sea mucho más que los daneses, en parte porque aún es chica y tiene políticas más agresivas. A mediados de año, su capitalización bursátil representaba US$ 8.000 millones en Bombay.</p>
<p> </p>
<p> </p>

Compartir:

spot_img
spot_img
spot_img
spot_img

Noticias

CONTENIDO RELACIONADO