Los US$ 20.000 millones se destinarán al establecimiento de dos fábricas en un nuevo predio situado en Columbus, capital de Ohio. La decisión forma parte de los esfuerzos de las Administración Biden por revitalizar la manufactura norteamericana y fortalecer las cadenas de suministro nacionales.
La compañía Santa Clara calcula comenzar la construcción en los próximos meses para que la producción arranque en 2025. . El “mega predio” en el estado del Medio Oeste tendrá capacidad para hasta seis fábricas de semiconductores. Se calcula que la fase inicial generará 3.000 empleos en Intel y 7.000 empleos en la construcción.
Es la última inversión en una serie de apuestas gigantescas por parte de Intel en sus esfuerzos por recuperar terreno perdido en fabricación de microprocesadores frente frente a sus competidores TSMC y Samsung. La compañía norteamericana prometió el año pasado inversiones de cerca de US$ 100.000 millones en otras dos instalaciones, junto con un nuevo predio en Irlanda que costaría otro tanto. En una serie de años.
Intel ha dicho que la inversión total en el predio de Ohio llegaría a los US$ 100.000 millones en la próxima década, con lo que se convertiría en el centro de fabricación de semiconductores más grande del mundo.