Según un estudio de Polytechnic Mersing, el 5G impulsará desde una mayor expansión del Internet de las Cosas (IoT) hasta una revolución en materia educativa que permitirá actualizar los sistemas de aprendizaje y mejorar el futuro de la instrucción en línea.
Sin ir más lejos, el 2020 ha sido el año de los videos tutoriales. Tan solo Youtube genera más de mil millones de visitas diarias en videos de aprendizaje y educación. Parte de los beneficios básicos que traerá la expansión del 5G, está justamente contar con una conectividad perfecta para descargar y mirar videos, además de ayudar a los maestros a eliminar el tiempo de inactividad en retrasos y fallas para enfocarse en instrucciones de valor agregado y materiales de referencia. Los problemas con el internet ya no serán excusas al momento de aprender.
Aulas inteligentes
En la experiencia de Capabilia, empresa que desarrolla plataformas de aprendizaje, han visto cómo maestros y estudiantes intentan adaptarse a una educación a distancia que llegó para quedarse. Sin embargo, este es el comienzo de una nueva Era en la educación, porque el 5G va a ir aún más allá, entregando la capacidad de ancho de banda necesaria para desplegar contenido de alta tecnología desde cualquier lugar y a cualquier hora.
Este escenario interactivo y virtual cambiará para siempre la forma de aprender que se conoce hasta ahora.
En este sentido, el 5G pavimentará el camino para aulas más inteligentes (y remotas) basadas en plataformas de aprendizaje de realidad mixta. Por ejemplo, Capabilia se encuentra en una constante búsqueda y aplicación de experiencias de aprendizaje efectivas en entornos digitales, que les ha ayudado a entender que los estudiantes responden mucho mejor ante procesos de aprendizaje activos e inmersivos, mejorando tanto su experiencia, como las tasas de retención.
Por otra parte, la quinta generación de tecnología inalámbrica potenciará el mayor uso de la tecnología IoT, lo que podría generar, en un futuro, una inclusión gradual de la robótica en las aulas como material didáctico.
Finlandia, por ejemplo, está experimentando con esta idea a través de Elias, robot que brinda apoyo en las clases de matemáticas y el aprendizaje de idiomas. Elias permite a los jóvenes estudiantes entablar conversaciones naturales al tiempo que agrega una dimensión de diversión a través de bailes y juegos.
De esta manera, el 5G podría servir como puente entre la realidad aumentada y las aulas de la vida real para todas las edades. El aprendizaje permanente podría alcanzar nuevos niveles de productividad con instructores holográficos y conceptos que surgen de libros de texto y videos y se vuelven realidad inmediata. Las posibilidades son infinitas en esta revolución tecnológica que está transformando la manera de enseñar y aprender.