Para Martins, los beneficios no monetarios tienen un peso clave en la estrategia de fidelización del talento. “Entendemos que cada persona es única y que sus necesidades cambian a lo largo de su vida. Por eso, evolucionamos constantemente nuestra propuesta de valor para los colaboradores, implementando un enfoque integral que incluye flexibilidad, bienestar, formación y propósito como pilares fundamentales para personalizar su experiencia”, explica. Desde 2024, la compañía trabaja con un sistema de “Beneficios Flexibles” a través de puntos, que permite a cada persona elegir los incentivos según su conveniencia. “A través de nuestras plataformas los equipos acceden a opciones en educación, salud, bienestar financiero, actividades recreativas también ponemos un fuerte foco en el desarrollo profesional a través del acceso a plataformas como Coursera y Cosmos Learning, y programas de becas con universidades prestigiosas. Con estas y otras iniciativas internas abordamos el bienestar de manera integral”, indica la ejecutiva.
¿Cómo se mide el impacto de estas iniciativas en la fidelización de los empleados?
Para medir el impacto en la fidelización de nuestros equipos realizamos encuestas de experiencia y focus groups de forma transversal a la organización. A partir de esos insights, construimos el “journey del colaborador”, asegurándonos de que cada etapa de su recorrido en Alsea refleje sus necesidades y expectativas. Este enfoque personalizado y centrado en el bienestar fortalece el compromiso y nos permite asegurar que esa experiencia positiva también se traduzca en el vínculo con nuestros clientes.
¿De qué modo se anticipan los cambios en el mercado laboral, impulsados por la inteligencia artificial y la digitalización?
Cuidar y potenciar nuestro talento es lo más importante. En un contexto de transformación acelerada, la única manera de evolucionar es seguir impulsando su desarrollo. No se trata solo de adaptarnos al cambio, sino de gestionarlo de manera activa, y la clave está en desarrollar el talento que necesitamos para el futuro. Por ello impulsamos un ecosistema de aprendizaje continuo, con acceso a herramientas y formación que potencian el crecimiento y la empleabilidad de nuestros colaboradores.
Nuestro plan de formación está orientado, además, a desarrollar la capacidad de incorporar tecnología en todos los niveles de la organización.
Creamos también el área de Change Management, con la meta de preparar, contener y empoderar a los líderes y sus equipos para que puedan llevar adelante la transformación con confianza. No es un esfuerzo aislado; incorporamos la transformación en cada proceso de recursos humanos.
El cambio solo se vuelve real cuando se vive de forma transversal en toda la organización. Sabemos que las competencias técnicas son importantes, pero son las habilidades humanas las que marcan la diferencia. Empatía, cercanía y la capacidad de conectar con los equipos son esenciales para el liderazgo del futuro. La tecnología es una aliada, pero liderar significa entender a las personas. El desafío no es solo adaptarse, sino gestionar el cambio con una mirada estratégica, humana y sostenida. Aprender, innovar y aprovechar la tecnología sin perder de vista lo esencial: el valor humano.
Impulsar el crecimiento equitativo
¿Considera que la equidad seguirá siendo un pilar estratégico en las compañías, o se han ajustado las prioridades?
A lo largo de los años, hemos promovido activamente el desarrollo de las mujeres en todos los roles, generando confianza para que puedan acceder a cualquier posición dentro de la compañía. Contamos con cientos de historias inspiradoras que reflejan nuestro compromiso y el impacto de nuestras iniciativas. Esto continuará siendo fundamental para nuestra organización dado que creemos que la diversidad potencia el desarrollo del negocio y enriquece nuestra cultura, por lo que fomentamos un ambiente en el que cada persona pueda aportar su sabor único. Más allá del género, siempre hemos conformado equipos basándonos en el talento y la capacidad, sin que la edad, identidad sexual u otros factores sean determinantes.
Por eso, seguimos fortaleciendo programas que impulsan la igualdad de oportunidades y garantizando que nuestras estructuras y procesos aseguren el crecimiento equitativo de todos los colaboradores. Construir una cultura diversa no es solo una cuestión de políticas, sino de acciones concretas que se reflejan en nuestros procesos de gestión, liderazgo y toma de decisiones. Estamos convencidos de que la equidad seguirá siendo clave para el éxito empresarial. No solo porque es lo correcto, sino porque los equipos diversos y equitativos son más innovadores, comprometidos y resilientes, permitiéndonos evolucionar y responder mejor a los desafíos del mercado.
