El anuncio de obligar a los estudiantes extranjeros a asistir a clase o a irse del país, más que anuncio fue amenaza. No se hizo de manera formal. La misma característica de informalidad tiene ahora la retractación.El juez a cargo del juicio presentado por la Universidad de Harvard y el Massachusetts Institute of Technology (MIT) dijo que el US Immigration and Customs Enforcement volverá a su directiva inicial y permitirá a los estudiantes extranjeros permanecer en el país aunque sus cursos sean totalmente virtuales.
La medida de restringir las visas a los estudiantes internacionales generó la indignación de universidades, empresas y estados de la Unión. Harvard y el MIT iniciaron uno de los juicio al gobierno; otra demanda fue presentada por más de diez compañías tecnológicas entre las que figuran Facebook, Google y Microsoft.
Por separado, los fiscales generales que representan a 18 estados y al Distrito de Columbia también iniciaron juicio a la Administración exigiendo bloquear la reglamentación que amenazaba con la deportación a los estudiantes afectados si no abandonaban el país o se transferían a una universidad con clases presenciales.
Ayer martes se dirimió la primera de las denuncias, la de las universidades, con un fallo en contra de la decisión de Donald Trump.