“Interpretamos la transformación digital como un proceso permanente con el que buscamos mejorar nuestros procesos, habilidades y tecnología para aumentar la calidad de los servicios que ofrecemos, e impulsar nuevas estrategias alineadas con los desafíos que tienen nuestros clientes. Esto es esencial para crecer en forma sana y rentable, porque las empresas necesitan avanzar en su propio camino de transformación y buscan recorrerlo cada vez con más velocidad y precisión para mantenerse competitivos –define Roberto Cruz, socio de PwC en Argentina y responsable de la práctica de IA e Innovación Digital para Argentina y Uruguay–. Es en este sentido que es tan necesario actualizar de modo constante nuestra oferta. Ayudamos a nuestros clientes a definir y llevar adelante sus proyectos de transformación, añadiendo mecanismos para identificar y gestionar los riesgos inherentes a realidades cambiantes y a una incorporación creciente de tecnología. Este enfoque holístico nos permite, apalancados en tecnologías como IA, ayudar a nuestros clientes en la definición de su estrategia, su posterior articulación, ejecución y evolución, y la configuración de su modelo de gobierno corporativo. Nuestra transformación digital es una pieza crítica para ser relevantes en el camino de transformación de nuestros clientes”, define el ejecutivo.
¿Considera que el modelo de negocios cambiará a futuro, a raíz de la aceleración digital?
Creo que el modelo de negocio de las empresas está siendo cuestionado o desafiado por factores que cambian a velocidades mayores que lo que solían hacerlo: factores demográficos, ambientales, geopolíticos y fundamentalmente tecnológicos, con especial mención a la IA, crean espacios de amenaza y oportunidades para empresas existentes y entrantes. Gracias a la tecnología, hay formas de generar y capturar valor que antes no eran posibles y las empresas que se propongan una evolución de su modelo de negocio y construyan las capacidades para aprovechar esas oportunidades serán ganadoras. Será clave que sepan adaptarse, tengan velocidad para proponer cambios, se permitan experimentar productivamente y manejen adecuadamente sus riesgos. Esta es una agenda que involucra desde el directorio hasta los equipos de trabajo, operando en sincronía.
¿De qué manera la transformación digital cambió la forma en que se toman las decisiones?
Las tecnologías y disciplinas digitales y de datos habilitaron la toma de decisiones basadas en información. La inteligencia artificial permite la comprensión y análisis de un conjunto mucho más amplio de información accionable y por lo tanto introduce el concepto de personas con inteligencia aumentada, empleados asistidos por IA para ejecutar tareas y tomar decisiones. Pero el cambio no termina ahí; si los colaboradores pueden tomar más y mejores decisiones seguramente podremos usar esas tecnologías para repensar los procesos y el esquema de delegación de decisiones, la implementación de controles y el tipo de decisiones que debe tomar ahora la gerencia, dado que muchas de las decisiones que tomaba ya pueden delegarse en los equipos de trabajo. Con sistemas que aprenden y se vuelven capaces de interpretar la totalidad de la información disponible, las organizaciones que implementen esquemas responsables de IA verán catalizadas tanto la velocidad como la calidad de las decisiones que toman y, sobre todo, capitalizarán el aprendizaje generado en cada ciclo de decisión, experimentación y resultado.
